Como una forma de contrarrestar los efectos de la pandemia por el coronavirus a nivel emocional, el viceministro de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales del Ministerio del Ambiente, Gabriel Quijandría, señaló que las áreas naturales protegidas se han convertido en espacios que generan beneficios para la población.
En ese sentido, indicó que el turismo en estos espacios naturales es una buena opción para reconectarse con la naturaleza, además de contribuir al buen equilibrio emocional de las personas que gradualmente están saliendo del confinamiento obligatorio (cuarentena) tras la pandemia por el COVID-19, según indicó un comunicado del Ministerio del Ambiente.
Por ello, la autoridad invitó a la población a recorrer las áreas naturales protegidas que gradualmente están reabriendo sus puertas para que puedan ver esto como una opción más de entretenimiento familiar y favorecer el equilibrio emocional conviviendo responsablemente con la biodiversidad.
Asimismo, en entrevista con Radio Nacional, Quijandría señaló que el Gobierno Central ha aprobado un protocolo de bioseguridad para los usuarios de las áreas naturales donde actualmente ya se permite el ingreso con un aforo del 50 % de su capacidad.
El Ministerio del Ambiente resaltó que en Chancay está ubicada la reserva Lomas de Lachay que también ha reiniciado su actividad en estos días donde los visitantes podrán apreciar la variada fauna y flora propia de la costa del Perú.
Además, está la reserva paisajística Nor Yauyos Cochas que se ubica entre la cuenca alta y media del río Cañete, en las serranías de Lima y Junín. Esta área cuenta con un impresionante paisaje natural altoandino dada la presencia de numerosas cascadas y formaciones del río donde se puede apreciar más de 40 sitios arqueológicos que representan la cultura de la zona.
Otra reserva natural es el Albufera de Medio Mundo, en la provincia de Huacho, que cuenta con lagunas donde se puede practicar el deporte de remo y otras actividades de sano esparcimiento.