Este fin de semana fue encontrado el cuerpo de una mujer que recién ahora pudo identificarse como la doctora Jessica Sevilla Pedraza. La profesional de la salud había sido reportada como desaparecida el viernes en el municipio de Zonacatlán, en el Estado de México.
Sevilla Pedraza era madre de un niño y desapareció mientras manejaba su auto en las inmediaciones de un grifo. Horas después, fue hallada muerta con huellas de extrema violencia y sin cabeza, la misma que se encontró a unos metros de donde estaba el resto de su cuerpo.
Los familiares de la víctima fueron notificados del hallazgo. Es así que se apersonaron a identificar a la mujer que vestía pantalón azul y una blusa rosa, la misma ropa con la que desapareció el pasado 4 de agosto.
‘Una mujer muerta más, una madre y doctora menos, torturada con saña. Hasta cuándo podemos salir a la calle con la certeza de que no nos tocará la puta delincuencia, cuánta rabia e impotencia en estos momentos’, escribió su hermana a través de las redes sociales.
Cabe indicar que de enero a junio de este año, las autoridades mexicanas han reportado 33 casos de feminicidios y 128 homicidios dolosos. Asimismo, en los últimos dos años, se han registrado muchos más crímenes de este tipo, a pesar de la alerta contra la violencia de género.
Desde marzo del 2011 a junio del 2017, se contaron 1.818 muertes violentas de mujeres, aunque el gobernador del Estado de México insiste en que solo 338 han clasificado como feminicidios.
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