La expresidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, pasó este viernes a cumplir su primer día en la cárcel tras una orden de prisión preventiva emitida por la justicia de ese país en el marco de las investigaciones del caso 'Rasputina'.
Park Geun-hye, de 65 años, miraba fijamente al frente e impasible mientras era conducida poco antes de la madrugada al centro de detención de Seúl, ante la presencia de varios reporteros que cubren el caso de corrupción en Corea del Sur.
Después de una larga audiencia el jueves, el tribunal del distrito central de Seúl emitió una orden de arresto contra la exmandataria de Corea del Sur, implicada en un escándalo de corrupción que ha conmocionado el país y a semanas de haber sido depuesta de su cargo.
La fiscalía todavía no la inculpó pero ya anunció que era sospechosa de corrupción, abuso de autoridad, coerción y filtración de secretos de Estado. "Está justificado y es necesario arrestar una vez demostrados los hechos, y porque hay riesgo de que se puedan destruir evidencias", indicó el tribunal de Corea del Sur.
Park Geun-hye es el tercer exjefe del Estado detenido por un caso de corrupción en Corea del Sur. Los exmandatarios Chun Doo-hwan y Roh Tae-woo cumplieron condenas de cárcel por ese motivo en los años 1990. Y el presidente Roh Moo-hyun, elegido democráticamente, se suicidó en 2009, después de que la justicia abriera una investigación por corrupción contra él y su familia.