El comandante del Cuerpo general de Bomberos Voluntarios del País, César García se quebró y lloró frente a cámaras por la muerte de sus tres compañeros, Alonso Salas, Raúl Sánchez y Eduardo Jiménez, durante un incendio en El Agustino.
"Estos bomberos han entrado para salvar vidas y, finalmente, ofrendaron sus vidas al interior del local. Muy triste, muy triste esto”, señaló entre lágrimas a Canal N.
Señaló que conoció a uno de ellos (Alonso Salas Chanduvi), con quien viajó a Arequipa. "Muchacho correcto, tenía alrededor de 25 años de edad... lamentablemente se nos ha ido", dijo.
Asimismo, aseguró que los tres agentes se encontraban preparados para atender este tipo de emergencias, y que ellos entraron para buscar personas que se puedan rescatar. “Alrededor de 80 años que no teníamos una pérdida como esta”, recordó.
"NO LOS OLVIDEN"
En otro momento, con la voz entre cortada, García pidió al Estado y a la sociedad no olvidar nunca este hecho. Sobre el estado en el que se encuentran sus uniformes afirmó que éstos están muy desgastados. “¿Hay deficiencias? Sí las tenemos. ¿Nos falta apoyo de parte del Estado? Nos falta apoyo de parte del Estado […] No sé si (me siento) abandonado, pero tenemos que hacer algo”, precisó.
Exhortó al Estado a prestar atención al cuidado en la vida del ser humano. “Lo único que necesitamos es equipamiento necesario para poder trabajar en las emergencias”, precisó.
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