Dos feroces asaltantes, que habrían participado en el frustrado asalto a los cambistas en el emporio comercial de Gamarra en La Victoria, abandonaron una pistola, chaleco antibalas, pasamontañas entre otros objetos en el interior de la iglesia ‘Virgen de Cocharcas’ en Barrios Altos, Cercado de Lima.
“Los delincuentes al verse rodeados por el plan ‘Cerco’, que tras el frustrado asalto se cerró todas las salidas del emporio de Gamarra, ingresaron en plena misa a la iglesia en la cuadra 9 del jirón Huánuco y dejaron abandonados una pistola MK, de uso particular, un chaleco antibalas (también de uso particular), una máquina de electroshock, pasamontañas, lentes y una casaca impermeable con capucha color negra. Todo fue descubierto sobre una banca cerca del confesionario”, informó el comandante Jorge Maceta, jefe del grupo ‘Los Halcones’ perteneciente al Escuadrón de Emergencia, quienes fueron alertados del hallazgo a las 10 de la mañana la iglesia ubicada entre jirón Puno y Huánuco en Barrios Altos, Cercado de Lima.
Los agentes inmovilizaron lo hallado en la iglesia en Cercado de Lima, a unos metros del hospital Dos de Mayo, y luego trasladaron todo a la Divincri Cercado.
Indicó además que esta intervención guarda relación con el asalto que sufrió el cambista Esau Luis Arana Taipe (33), la tarde del miércoles cuando fue asaltado por tres delincuentes en la cuadra 9 del jirón Gamarra, a unos metros del Parque Cánepa en el Cercado de Lima.
“Dos sujetos se me acercaron como clientes y me robaron el canguro. Mi hermano Wilfredo Arana Taipe (39), reaccionó y persiguió a los hampones, que estaban a punto de fugar en una moto, y les arrebató el canguro logrando recuperar los 20 mil dólares, que nos robaron. Los delincuentes enseguida dispararon como locos varias veces e hirieron de un balazo en la pierna izquierda a mi hermano a quien primero leve a la clínica Gonzales en Lince y luego al hospital Casimiro Ulloa”, contó Esau Arana, a los policías de la Divincri La Victoria, que están a cargo de las investigaciones.
Agregó que ahora temen por su vida pues los delincuentes pueden regresar y tomar represalias contra sus vidas. Los hermanos trabajan juntos en el emporio comercial de Gamarra desde hace 20 años.
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