Tres jóvenes quedaron impedidos de postular a una universidad estatal tras ser descubiertos con todas las respuestas de un examen a admisión. Pero, ¿cuál sería el castigo cuando los que hacen trampa son dos directores en una prueba para obtener un ascenso?
Estos lamentables hechos ocurrieron en Mendoza, Argentina. Los docentes fueron sorprendidos el pasado 31 de julio copiándose durante un concurso de jerarquía directiva, en el que participaron 3.576 maestros.
Uno de los ‘copiones’ tenía incluso 10 ‘plages’ escondidos bajo la manga. Esto fue descubierto por un encargado de supervisar que el examen transcurra con normalidad, que notó una actitud sospechosa del culpable y se acercó a interrogarlo.
“Lo pescaron in fraganti con 10 machetes (plages) y en el momento se elaboró un acta y se dio aviso a las autoridades de mesa”, dijo Francisco Fernández, director de Asuntos Jurídicos de la Dirección General de Escuelas de Mendoza, al diario UNO.
“Debido a que el aspirante a director es docente titular y ejercía aquel cargo como suplente, se evaluará sus antecedentes. Se le puede dar de baja en su cargo y por un año no podrá presentarse a concursar ningún cargo", explicó el funcionario argentino.
El otro caso ocurrió cuando los encargados descubrieron copiándose a un postulante de una escuela secundaria de Educación Especial de Argentina, pero a diferencia del anterior, este era un tramposo más “tecnológico”.
“Por lo que sabemos también era un directivo suplente que usaba para copiar un dispositivo similar a un audífono”, revelaron los investigadores argentinos. Según trascendió, el docente tramposo tenía un cómplice que le transmitía las respuestas al oído.
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