El expresidente Alejandro Toledo se quedó sin casas pues el Poder Judicial, a solicitud del Ministerio Público, dispuso la incautación preventiva de sus dos inmuebles ubicados en la urbanización Camacho, distrito de La Molina, y también el del balneario de Punta Sal, cuyas hipotecas fueron canceladas por la empresa Ecoteva.
La primera vivienda intervenida ayer en la mañana por la fiscal Manuela Villar, bajo la disposición de una ‘incautación total’, para que pase a disposición de la Comisión Nacional de Bienes Incautados (Conabi), pero Alejandro Toledo de inmediato, a través de su abogado Luciano López, consiguió que dicha orden sea revocada y se disponga la ‘incautación sin disposición’. Lo que significa que puede hacer uso del bien.
Otro inmueble, que también será incautado en las próximas horas, para pasar a manos de Conabi, es el ubicado en el balneario del norte del país.
La órdenes se emitieron en el proceso penal que, desde abril, enfrentan Alejandro Toledo, su esposa Eli ane Karp, el empresario Josef Maiman y otros por delitos de lavado de activos.
Todos son acusados de integrar una organización que introdujo dinero ilícito al país a través de empresas de fachada, como Ecoteva, para ‘lavarlo’ a través de la adquisición de inmuebles costosos.
‘TORRE OMEGA’
“No fue una incautación total, porque es el único inmueble que Alejandro Toledo tiene en Lima”, dijo el letrado Luciano López.
El martes y miércoles también se aplicó esta misma medida en una oficina de la ‘Torre Omega’ y una casa en Las Casuarinas, en Surco, adquiridas por Eva Fernenbug, pero que son de propiedad de Maiman.
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