Si creías haber visto todo, este video viral de YouTube te demostrará que no es así, ya que el mencionado clip muestra cómo un joven decide proponerle matrimonio a una desconocida y luego recibe una inesperada respuesta de ella. La escena fue grabada en el centro de Atlanta, en Estados Unidos (USA).
Según la descripción de la publicación realizada en YouTube, durante las celebraciones de un evento del Super Bowl, Keith Jones desafió a su amigo 'JC' a que haga una singular broma para llamar la atención de todos los transeúntes, que consistía en ir hacía una mujer que no conocía en lo absoluto y luego pedirle la mano.
Lejos de acobardarse, el muchacho aceptó y es por eso que las imágenes difundidas en YouTube nos permiten apreciar que se acercó a dos mujeres completamente desconocidas y a una de ellas le propuso matrimonio tras ponerse de rodillas y mostrarle un anillo que consiguió al paso.
La joven, visiblemente avergonzada y sin entender lo que estaba pasando, solo atinó a reírse en ese momento. La escena de inmediato causó gran impresión entre las personas que estaban transitando, pues los amigos del ‘bromista’ empezaron a hacer demasiado ‘ruido’ al presenciar lo que ocurría, tal y como se observa en el clip viral de YouTube.
Ello ocasionó que la gente creyera que realmente era una propuesta llena de amor y por ende rodearon a los dos con cámara en mano para poder grabar el desenlace, mientras coreaban “say yes”, que traducido al español significa “di sí”. En ese instante, de acuerdo a la grabación viral de YouTube, la mujer, actúa como si estuviera cuestionándole al muchacho de por qué hacía todo eso, sin llegar a molestarse.
Segundos después el video compartido en la plataforma nos muestra que la joven terminó diciendo “sí, acepto” y luego se dio un abrazo con el muchacho, accionar que incrementó la euforia de todos los presentes y de miles de usuarios de YouTube, quienes nunca imaginaron que algo así pudiera ocurrir.
Si te llamó la atención este video, no puedes dejar de ver el momento en que un cuervo intentó detener la pelea entre dos gatos de una singular manera.