Leo se mostraba muy distinto, había comenzado a evidenciar una conducta que le era un poco ajena. Su familia, tras revisar en Google las posibles causas, se preocupó: creían que el perro corría peligro y rápidamente buscaron ayuda profesional.
El perro empezaba a aplastar su hocico sobre diferentes superficies de su casa, sus dueños creyeron que sufría un grave problema de salud y gastaron varios dólares en análisis veterinarios. Al final, conocieron el verdadero motivo.
Leo llegó a la vida de Christine y Remi, una pareja holandesa, en 2020 y con tan solo unos meses de nacido. Según contó la joven 27 años, adoptó a la mascota de una granja en los Países Bajos. “Dos años atrás estaba en una situación muy mala de mi vida (decaída anímicamente) y pensé que un perro obligaría a salir de nuevo a la calle”, contó Christine en diálogo South West News Service.
Durante su recorrido en la granja, notó que había muchos canes. “Miro al interior del granero y veo dos ojos azules que me observan. Inmediatamente, Leo corre hacia mí y salta. Fue el primer cachorro que me saltó y supe que debía llevármelo”, contó la mujer.
Así, Christine regresó a la propiedad con la mascota y le dio la noticia a su pareja, quien no sabía de la adopción. “Mi novio no lo sabía, así que le di algunas explicaciones”, contó.
Tras algunas semanas en casa, la pareja notó que Leo apoyaba su hocico con intensidad en los muebles, vidrios, sofá y demás cosas en la casa. “Mi novio y yo no podíamos dejar de reírnos cuando lo vimos actuar de esa forma”, narró la mujer.
“Después de leer algunos artículos al respecto, me preocupé porque puede ser un signo de un problema de salud, así que hicimos una visita al veterinario”, añadió la joven. Tras someterlo a varios estudios, recibieron una gran noticia: Leo no tenía ninguna enfermedad grave.
Entonces, ¿por qué aplasta su hocico? Pues la respuesta era más obvia de lo que esperaban. “El veterinario nos dijo que simplemente tenemos un perro sano al que solo le gusta presionar su hocico contra las cosas”. Christine se percató que Leo apoya el hocico en el sofá cuando quiere subirse y si lo hace sobre la ventana significa que necesita salir al patio o ingresar a la casa.
“Solo deseo que mucha gente disfrute de las andanzas de Leo. Muchas veces me dicen en los comentarios de los videos que Leo les cambió el día y les puso una sonrisa en la cara. Me alegra mucho oír que cuenta con la capacidad de lograr eso”, reflexionó Christine.
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