A sus 17 años, Adriana Buendía ya perdió la cuenta de las medallas de oro que ha ganado bajo el agua. Intenta calcular el número exacto de sus trofeos pero enseguida se aburre y cambia de tema: coleccionar medallas no es tan entretenido como lanzarse de cabeza a la piscina. En casa las tiene guardadas en un cajón en vez de exhibirlas en la pared de la sala. “Al final el pedazo de metal no importa mucho, lo que importa es la experiencia que gano en cada carrera”, explica la joven nadadora a pocos días de la competencia más importante de su vida: los 200 metros en los Juegos Panamericanos Lima 2019.
Todos los días, a las cinco de la mañana, Adriana despierta a sus padres para que la lleven a entrenar. En su corta carrera, ha logrado alcanzar el segundo récord más importante del país: 2 minutos 43 segundos en 200 metros estilo pecho. Ahora se prepara para romper su propio tiempo. “Al ser un deporte de carrera, mi primer enemigo siempre es el cronómetro”, explica la adolescente.
Para mejorar ese tiempo, ella requiere entrenar en una infraestructura en la que su cuerpo pueda desplazarse cómodamente por una piscina temperada. El agua caliente es esencial en los movimientos de un nadador. Por eso la organización de los Juegos Panamericanos decidió construir una nueva piscina olímpica en la Videna. La sede, llamada Centro Acuático, cuenta con 26 termotanques y 4 calderas a Gas Natural de Cálidda, que permitirán temperar las piscinas de competición.
Cada vez que Adriana se ha zambullido en las aguas de la Videna, no ha podido borrarse la expresión de asombro. “Es increíble poder tener una piscina tan moderna en el país”, admite la deportista. Sabe que en esa piscina podrá lograr su objetivo principal en estos juegos: romper su propio récord. Sueña con ese instante: las tribunas explotando de alegría y ella con el cuerpo extendido, en medio del agua, acariciando antes que nadie el primer lugar.
Utilizar el Gas Natural como fuente de energía no sólo sirve en centros de consumo masivo como los recintos de los Juegos Panamericanos. Con el uso de una terma a Gas Natural para generar agua caliente en un hogar, se ahorra hasta un 60% en comparación con las termas eléctricas. Hasta la fecha, con 15 años de presencia en el país, más de 750 mil hogares en Lima y Callao se han beneficiado con Gas Natural a través de las redes de distribución de Cálidda.
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