Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un pollito al maní con papa amarilla, una pequeña porción de arroz blanco y rocotito molido. Para tomar, una jarrita con refresco de cocona. “María, las familias ya están pensando en cómo pasarán la Nochebuena. Por la pandemia, habrá carencias y ausencias físicas, pero hay que levantar el ánimo por estar unidos, con amor y pedir que esta fecha tan especial, por el nacimiento de Jesús, nos traiga salud y fortaleza. La festividad hace que, en cualquier hogar, dentro de sus posibilidades, se comparta algo especial. Clásicos son el chocolate y el rico panetón, así como el pavo y el chanchito, otros optarán por pollo. A eso le sumarán salsas, ensaladas, dulces y licor, pero muchas veces con malas combinaciones y excesos que pueden requerir atención médica. Incluso colas por cervezas se han visto y ya varios aseguraron sus ‘cajitas’ o ‘six packs’ para no salir de casa. Cuidado, todo eso pasa factura, afecta al hígado, juega a favor del sobrepeso, la diabetes y otros males que incluso complican nuestras defensas frente al coronavirus.
Para cuidar la salud y la de nuestra familia, especialistas en nutrición como Jimena Trujillo, de Laboratorios Hersil, y Saby Mauricio, actual directora de la Escuela de Nutrición Humana de la Universidad Norbert Wiener, aconsejan:
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