Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su sopa de pollo, lentejas con pescado frito y, para tomar, refresco de camu camu con hielo. “María, ayer asistí de casualidad a un accidente de tránsito entre una combi de transporte público con una camioneta de una entidad pública, que dejó como ocho heridos, entre ellos dos escolares que iban a su primer día de clases.
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Hubieras visto cómo se quejaban de dolor y de terror los niños, quienes ayer iban a reencontrarse después de dos largos años con sus amiguitos y a cambio tuvieron una mañana de pesadilla.
Por eso los padres se mueren de terror cada vez que ven salir a sus hijos a la calle, porque no saben qué encontrarán o si regresarán sanos y salvos. Lima ya parece una ciudad sitiada por los rusos en Ucrania.
Si no nos asaltan, nos atropellan o hasta nos puede caer una bala perdida. Los próximos alcaldes y autoridades del Ejecutivo tienen que sentarse y enfrentar el problema del transporte en forma seria y sin ‘lobbys’ de por medio.
Tampoco dejarse presionar por ningún gremio. Mientras tanto, les dejamos algunos consejos para que los sigan sus hijos o ustedes mismos cuando vayan al colegio en transporte público o privado:
- Salga con tiempo suficiente de casa para no estar corriendo apurado o nervioso. A veces los niños se pueden caer o resbalar mientras corren, o cruzar la pista de manera intempestiva sin mirar si viene un carro.
- Si es posible, acompañe a sus hijos al colegio, suba con ellos al bus para asegurarse de que no les pase nada.
- Siempre salir del carro por el lado de la acera. Aunque lleguen tarde al colegio, la seguridad es lo primero. Moléstese en sacar a sus hijos por el lado de la acera, en el que seguro que no habrá ningún coche que haga peligrar su seguridad.
- Si tiene auto propio, estaciónese en zonas habilitadas. Si aparca en doble fila o, por ejemplo, en una zona para autobuses, los niños pueden correr algún peligro indeseado.
- Extremar la atención y respetar las normas. Por muchas preocupaciones que tengamos, la salud y el bienestar de sus hijos requieren de mucha atención. No se despiste y respete todas las normas de tránsito.
- No llevar objetos sueltos en el coche. Cualquier frenazo o giro brusco puede suponer una desgracia. Asegúrese de que sus hijos no lleven objetos sueltos que puedan ser peligrosos.
- Cinturón de seguridad. Imprescindible que lleven puesto (y bien puesto) el cinturón de seguridad en todo momento, por mucho que se puedan quejar al ponérselo.
- Conducir con precaución. Esta debería ser la primera norma: mucho cuidado al conducir. No hace ni falta decir que es obvio para garantizar la seguridad de sus hijos”. Gary tiene toda la razón, no debemos dejar nada suelto por la seguridad de nuestros hijos. Me voy, cuídense.
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