Pancholón atrasador
Pancholón atrasador

El Chato Matta llegó al restaurante después de revivir tras su ‘semana tranca’. Para componer el cuerpo pidió una parihuela de cachema con mariscos, una porción de arroz blanco graneadito, ajicito molido y una jarra con agüita de cocona heladita. “María, me mandó un mensaje el gran Pancholón. Su voz se escuchaba bajita: ‘Chatito, para ti solo, baja urgente a la clínica. Recién abro los ojos, tú eres mi hermano, no me abandones’.

Contenido sugerido

Contenido GEC