Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un arroz a la cubana con arrocito, plátano frito y huevo. Para tomar pidió una jarrita con emoliente tibio. “María, este domingo se celebrará en todo el Perú el Día del Padre. Miles de familias aprovecharán la ocasión para agasajar al ‘Rey de la casa’ con fiestas, almuerzos, regalos y paseos. Pero en otros hogares la fecha pasa inadvertida, pues falta la figura paterna.

Según el Instituto de Estadística e Informática (INEI), en el Perú hay 645 mil 32 hogares liderados por madres solas. Por alguna razón: fallecimiento del papá, divorcio, alejamiento u otra circunstancia, una gran número de niños y adolescentes se crían solo con mamá. Escucho repetidamente que muchas mujeres se sienten orgullosas de esto y dicen ‘yo puedo sola, no necesito de ningún hombre’. Seguramente es así, pero quienes sufren son los hijos.

Especialistas afirman que la figura paterna desempeña un papel fundamental en el desarrollo integral de los hijos, tanto en el ámbito emocional, social como cognitivo. Un padre comprometido y afectuoso contribuye a una mejor autoestima, habilidades sociales, rendimiento escolar y bienestar psicológico de los niños. Cuando el progenitor está ausente, algo pasa en la psiquis, en la mente del niño. No se siente igual.

Más aún cuando ven que los papás de otros niños los recogen del colegio, salen a pasear en familia, juegan fulbito o pasean con la bicicleta en el parque y participan en las actuaciones por el Día del Padre en la escuela. En algunas casas, el abuelo o el tío querendón suplen en algo la falta del padre, pero no es lo ideal. Conozco algunos papás que dicen: ‘Yo le envío todos los meses su plata a mi hijo’. Eso es una obligación. Pero no todo es dinero, también es atención, cariños, gestos, tiempo y una palabra bonita.

Estar separado de la mamá de tu hijo no significa estarlo también de tu retoño. Date un tiempo para él o ella. La prioridad en tu vida no es el trabajo, los amigos, la diversión o el trago, son los hijos. Por eso, este domingo enviaré un saludo a los verdaderos padres, esos que están siempre en las buenas y en las malas”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.

TE PUEDE INTERESAR

Contenido sugerido

Contenido GEC