Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un sabroso tallarín saltado de pollo. Para tomar pidió una jarrita de chicha morada. “María, el Perú es un país atractivo para el turismo, la gastronomía, las exploraciones mineras y la arqueología, entre otros quehaceres humanos.
En estos días tenemos entre nosotros a la bella modelo y actriz de Hollywood, Kiernan Brennan Shipka, quien apareció en la serie ‘Mad Men’, la misma que no desaprovechó la oportunidad de visitar el restaurante Central, considerado el mejor del mundo. También ha visitado hermosos lugares del Perú. Seguramente ella cuando regrese a su país comentará lo bien que la han tratado y la espectacular gastronomía que tenemos.
Es que tenemos de todo para ser un país del primer mundo. No solo por su gente pujante y emprendedora, sino que nuestro suelo guarda enormes yacimientos mineros y el mar de Grau es inmenso y rico en especies. Además, tenemos el pulmón del mundo como es la Amazonía y nos podemos jactar de ser el sitio donde florecieron culturas importantes de la humanidad como la inca, Paracas, Chimú, Chavín, Huari y Caral.
En esta ola delincuencial que venimos sufriendo, sin parangón en toda nuestra historia y solo semejante a la época terrorista, es bueno destacar nuestros aspectos buenos. No solo los peruanos son delincuentes extorsionadores o asesinos. Tampoco los extranjeros que han pisado nuestra tierra. Hay colombianos, ecuatorianos y venezolanos médicos y profesionales que son de gran aporte a nuestra nación.
Lamentablemente, con las fronteras abiertas no solo entraron los buenos, sino también los malos. A estos últimos hay que combatirlos con todo lo que tengamos a mano. Eliminada la delincuencia como se eliminó el terrorismo genocida de Sendero Luminoso y el MRTA, viviremos mejor. Volveremos a ser el ‘tigre de Sudamérica’, esa condición que perdimos por la inestabilidad política iniciada en 2016, cuando asumió el gobierno Pedro Pablo Kuczynski y que continuó con la elección de una persona realmente limitada como Pedro Castillo. Imagínense.
Tan mal estamos, que solo en lo que va del año se ha detenido en la frontera de Estados Unidos a 32 mil peruanos ilegales, mayormente jóvenes. Nuestros compatriotas se van porque sienten que no hay futuro en el Perú. No les importa arriesgarse en el desierto norteamericano y con el peligro de ser asesinados por los ‘coyotes’ mexicanos en busca de un sueño. Eso no está bien. El Perú es rico en todo, no es posible que nuestros talentos se vayan para siempre. Ya basta de delincuencia, corrupción y mal gobierno. En las próximas elecciones, barramos a los lobistas, delincuentes mochasueldos y advenedizos de la política. Realmente ya estamos hartos”. Asu. Me voy, cuídense.