Del saque somos carnecita… Estamos a un mes de la fecha doble de las Eliminatorias, donde enfrentaremos a Bolivia y Ecuador y Alberto Rodríguez sigue sin jugar, sin competencia, sin actividad y lo necesitamos con urgencia. Viene de ser el mejor de la Copa América Centenario y se planta para esperar una oferta del extranjero. Nada le costaba renovar con Cristal, poner una cláusula y asunto arreglado. Ahora anda desocupado, entrena cuando quiere en la Videna y el ‘Tigre’ duda en convocarlo. Somos vivos para la criollada, palomillada, pero sonsos para lo que vale la pena. Esperemos que Carlos Zambrano, Carlos Ascues y Christian Ramos no se lesionen porque con Adrián Zela y Horacio Benincasa me da un infarto. Así es…
Me pasan la voz que Jorge Luis Pinto recomendó a su paisano Brynner García a Universitario. El ‘Pelo duro’ Ibáñez lo timbró hace año y medio para pedirle referencias y le contestó: “Ese chico es A1, un gran profesional y la va a romper”. Lo que faltó añadir es que es una mazamorra y de sobre. Lo rescatable es que los colombianos, argentinos y brasileños se dan la mano y no se meten puñales y verduguillos como el ‘Niño rata’ con el bigotitos que lloró en todas sus despedidas. Aquí si llaman a alguien, en one tiran barro con ventilador: ‘Es borracho, tramposo, juerguero y arruga’. Ayayayay…
Al ‘Cholito’ no lo agarran de cholito. Irven Ávila desechó una propuesta de Vélez porque le pagaban casi lo mismo que en La Florida y en pesos, moneda que se devalúa a cada rato. Hay un runrún fuerte que LDU de Quito lo quiere, su pase está cotizado en 800 mil ‘cocos’ y la mitad pertenece al jugador. Están analizando la situación para decidir su venta. Cuidado que se te escapa el tren. Ya es tiempo que salgas del cascarón. ¿Estás o no, para el nivel internacional? Rexuxa…
La Calle Huasca, perdón, la Calle Lima de La Perla, ayer estuvo de rompe y raja. Fue el cumpleaños 39 de Dagoberto Goyzueta, un ‘10’ de aquellos del Sport Boys, que reunió a su batería. Preparó un seco a la norteña serio, serio, serio y que no se come en ningún restaurante de Gastón. La firme que los camarones dieron la hora y no pusieron ni para los mondadientes. El primero en la fila fue ‘Chicho’, que encima pide una bolsa para llevar a su casa. ‘Chichi’, ‘Triqui’, ‘Ojitos’, ‘Canela’, Pachi, el ‘Chino’, el ‘Amigo’, ‘Canela’ y otro personal almorzó y se paró. Un abrazo al dueño del santo y su familia que se portaron con mucha calidad… Me voy, soy fuga.
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