La habitación donde sucedió de John Bolton reúne memorias que son el relato más completo y sustancial sobre la administración del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump publicado hasta la fecha, y uno de los pocos, si no el único, escrito por un funcionario del más alto nivel.
La cercanía diaria a del presidente estadounidense le permitió a John Bolton - fue asesor de Seguridad Nacional del gobierno de Donald Trump - hacer una precisa radiografía de sus días en el Despacho Oval y de un mandatario para el que ser reelegido era lo único que importaba, poniendo de manifiesto su desconocimiento de la política exterior o las continuas transgresiones durante su mandato.
El libro reúne algunas ideas clave que resaltamos aquí y que pueden ayudar a entender porqué se suscitó la toma del Capitolio por parte de seguidores de Donald Trump.
- La creencia general, atractiva para los que son intelectualmente perezosos, es que Trump siempre fue un hombre estrafalario, pero que, en sus primeros quince meses, inseguro en su nuevo puesto y controlado por el famoso «eje de adultos», dudaba en la toma de decisiones. Este «eje» se refiere a los asesores para temas importantes. A medida que pasaba el tiempo se fue sintiendo más seguro de sí mismo, se distanció de ellos, las cosas se vinieron abajo y se rodeó solo de personas que le decían que sí a todo. El autor los llama «adultos» porque el presidente muestra una personalidad infantil.
- Como el «eje de adultos» lo hizo tan mal con él, Trump desconfiaba de los demás, veía conspiraciones por todas partes y —esto era increíble— seguía sin ponerse al corriente sobre cómo dirigir la Casa Blanca y mucho menos el inmenso Gobierno federal. Aun así, el «eje de adultos» no era totalmente responsable de esa situación. Trump es Trump.
- Ni Trump ni su equipo —al menos, la mayor parte— leyeron el «manual de instrucciones» del Gobierno, tal vez porque no se dieron cuenta de que el hecho de leerlo no los convertía automáticamente en miembros del «Estado profundo».
El autor: John Bolton ha pasado muchos años en la Administración pública y ha ocupado puestos de alto nivel para los presidentes Ronald Reagan, George H. W. Bush y George W. Bush. Entre 2005 y 2006 desempeñó el cargo de embajador de Estados Unidos en Naciones Unidas, y entre abril de 2018 y septiembre de 2019 fue consejero de Seguridad Nacional de Donald Trump.