El verano es sinónimo de sol, alegría y amigos, pero sobre todo de reuniones donde, en la mayoría de casos, está presente una deliciosa parrilla.
Si piensas que realizar una parrillada podría salirte caro, tranquilo, porque a continuación te daremos algunos trucos para que ahorres y disfrutes de un bonito momento frente a las brasas y en compañía de tus seres queridos.
Utiliza razonablemente el carbón
Ten presente que este combustible natural se calcula un kilo por cada kilo de carne. Para que ahorres más, no pongas todo el carbón de frente en la parrilla y antes de asar la carne, debes esperar a que esté bien rojo.
Busca ofertas de carnes
En verano varios supermercados ofrecen precios bajos de carnes, sobre todo de aquellas de corte parrillero, las cuales tienen mayor cantidad de grasa y son más las que tienen más sabor.
Guarniciones frescas
Preparando ensaladas de verduras crudas ahorras, aunque no lo creas. Evitando el uso de gas para sancocharlas, no solo ahorrarás dinero, sino también tiempo y con un aliño distinto, quedará espectacular. Lechuga, cebolla, espinaca, tomate, zanahoria, etc., son algunos de los vegetales perfectos para acompañar tu parrilla.
Visita el mercado y busca tu acompañamiento perfecto
Recuerda que en los centros de abastos los precios de los productos perecibles son más económicos. Papas, choclos o camotes los puedes encontrar a precios súper accesibles.
Refréscate naturalmente
Una limonada o un jugo de maracuyá es perfecto para acompañar tu parrilla. Prepararlos es muy sencillo y económico, pero sobre todo saludable, a diferencia de las gaseosas que son más caras y pueden generar algún malestar en nuestro organismo.
Conoce el número exacto de invitados
Previniendo eso puedes comprar la cantidad necesaria de carne para la parrillada. De esta manera, evitarás comprar de más, pero si deseas servir otras opciones, puedes hacerlo con pollo o pescado, de esta manera bajará tu inversión al comprar carne.