Si al revisar el cuaderno de control de tu hijo encuentras que su maestra te informa que fue indisciplinado durante la clase, pero cuando le preguntas a tu engreído sobre lo ocurrido, él lo niega, ¿a quién le crees?
Antes de llamarle la atención a tu niño o ir en contra de la profesora, debes saber que estos casos de contradicción son muy frecuentes en la etapa escolar.
Para el psicoterapeuta familiar, José Baldeón Valdivia, lo mejor que los padres pueden hacer es:
1. Conversar con cada una de las partes por separado, es decir, con la maestra y el menor.
2. Solicitar a la profesora detalles y circunstancias de los hechos cometidos por el niño. Esto te permitirá evaluar la conducta de tu hijo y explicarle que lo correcto es cumplir con las normas del salón.
3. Evitar desacreditar al docente delante del niño, menospreciar su labor o llamarla ‘mentirosa’. Eso solo empeorará la situación.
4. Tampoco llames mentiroso a tu hijo. “Hay que recordar que el pequeño tiende a negar lo que hizo, no porque sea mentiroso, sino porque tal vez aún no tiene conciencia de que lo que está haciendo está mal”, dice el experto. Dale el beneficio de la duda y habla con él e intenta llegar a la verdad.
5. Preguntar a otro alumno de confianza. Una visión imparcial te puede aportar más información para actuar.
6. Proponer soluciones al profesor. Por ejemplo, que apunte en la agenda escolar, con caritas sonrientes o tristes, cómo se portó el menor en su clase. Así, el niño también se sentirá reforzado a portarse mejor y traerá muchas caritas sonrientes a casa.
SABÍAS QUE...
Hay maestros que son más estrictos que otros, pero también padres que defienden ciegamente a sus hijos y culpan a los profesores de todos los problemas que pasan dentro del salón.