La radiación solar puede ser muy peligrosa y ocasionar males como el cáncer de piel. Para protegernos correctamente debemos tener en cuenta dos aspectos fundamentales: utilizar bloqueador solar y alimentarnos de forma saludable.
Ingrid Pérez, nutricionista de Oncosalud, afirma que existen alimentos que cuentan con compuestos que mejoran la respuesta de recuperación y conservación de la salud de nuestra piel ante los rayos del sol.
Según la nutricionista, estos son los más importantes para la piel y los alimentos donde podemos encontrarlos.
1. Hidratación. Mantener la piel hidratada brinda beneficios estéticos y mejora su elasticidad. El contenido de agua en la piel debe ser de 10 % a 20 %.
Las frutas como: sandia, naranja, melón, mandarina, etc, aportan buena cantidad de agua, vitaminas y antioxidantes que ayudan a proteger la piel.
2. Carotenoides. Son compuestos que actúan como protectores de la piel y agentes anticancerígenos. La sobreexposición al sol hace que estos disminuyan, por lo que debemos recuperarlos ingiriendo frutas y verduras principalmente de color naranja y rojo como: la zanahoria, tomate, zapallo, camote, mango, melón, mandarina, fresa, sandía, entre otras.
Además favorecen la síntesis de melanina, filtro natural de la radiación ultravioleta.
3. Omega 3. Estos ácidos grasos se incorporan a las capas de la piel protegiéndola del daño de los rayos solares. Los encontramos en los pescados de carne oscura, los frutos secos, la chía, sacha inchi y linaza.
4. Resveratrol. Es un compuesto que forma parte de los antioxidantes. Tiene un rol fotoprotector y retarda el envejecimiento de la piel. Se encuentra presente en las semillas y la cáscara de las uvas.
5. Vitamina D. Protege a nuestro cuerpo de diversos tipos de cáncer como el de piel, colon, mama y próstata. Se encuentra en los pescados de carne oscura, yema de huevos, quesos y alimentos fortificados.
6. Vitamina C y E. La vitamina C tiene propiedades antioxidantes. La vitamina E, que también actúa como fotoprotector, se puede hallar en los aceites vegetales, frutos secos, germen de trigo y verduras de hoja verde.