Los problemas de sueño son aquellas afecciones que alteran los patrones normales del descanso. Es importante tener en cuenta que, por más que se acueste temprano, si presenta algún transtorno del sueño, lo más probable es que se vea imposibilitado de domir, se levante constantemente cada 1 o 2 horas durante la noche o se despierte muy temprano por la mañana, a pesar de no haber descansado las horas adecuadas.
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Por eso, Sylvia Rodríguez, nutricionista del equipo Magnenol, recomienda seguir estos consejos para conciliar el sueño:
Una de las propiedades que proporciona el magnesio es la capacidad de ayudar a mejorar la calidad de sueño. Este mineral desempeña un papel importante en el sueño profundo, ya que permite la relajación y da paso al descanso reparador. Lo recomendable es incluirlo en la alimentación a través del consumo de espinacas, berros y almendras. Si se presenta alguna deficiencia de este nutriente, la suplementación también es una buena alternativa, previa consulta médica.
Una de las tres comidas diarias que tiene un mayor impacto en el sueño es la cena. Se sugiere la ingesta de alimentos ligeros, ya que, durante la noche estos componentes son digeridos por el organismo. Lo ideal es comer de 2 a 3 horas antes de ir a la cama, esto permitirá que se tenga alrededor de 11 horas de desanso entre cena y desayuno, lo que ayudará a que el cuerpo pueda recuparse durante la noche.
El consumo de cafeína pasado este horario puede ser perjudicial para la calidad del sueño. El café es uno de los componentes que cuenta con una duración prolongada del efecto cafeína, por lo que, beber una tasa, por más mínima que sea, pasada esta hora imposibilitará la capacidad de conciliar el sueño.
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