El azúcar ha sido desde siempre una fiel compañera de las comidas dulces. Para muchos, es lo que la da un sabor inigualable a ciertos postres, comidas e incluso bebidas que hoy en día se producen en masa y sin mucho control de salud. De hecho, muchos alimentos en el mercado mundial se producen con alto grado de azúcares que pueden ser dañinos para ciertas personas.
Aunque también está la otra cara de la moneda. El azúcar es necesario en la dieta humana ya que brinda la energía que el organismo necesita para que cumpla con sus funciones, tal como lo reveló la última investigación de United States Agency International Development (USAID): “La glucosa es el principal alimento del cerebro humano y se encuentra en casi todos los alimentos en mayor o menor medida.”
El azúcar entonces permite que haya un buen funcionamiento de músculos, retina y el sistema nervioso e incluso se menciona en la investigación que casi el 20% del azúcar que consumimos se va directamente al cerebro para que pueda operar correctamente.
Entonces estamos en una encrucijada: si bien por un lado el azúcar es un elemento primordial en nuestra dieta, su exceso puede relacionarse con peligrosas enfermedades degenerativas. Esto se debe principalmente al mal hábito alimenticio que deriva en un problema de sobrepeso, padecimientos dentales, aumento de niveles de insulina, diabetes, hígado graso y otros muchos males que incluso se expresan en la degeneración del funcionamiento cognitivo.
Pero, ¿qué sucede cuando eliminamos el azúcar de nuestra dieta? ¿Es algo bueno o malo? En El Universal realizaron un resumen de la investigación de la USAID y sacaron estas conclusiones. Cabe resaltar que no se trata de no comer ningún tipo de azúcar, porque casi todos los alimentos tienen un poco, sino de disminuir el exceso que se hace día a día con otras comidas.
MEJORA LA SALUD DEL HÍGADO
La grasa corporal aumenta cuando existe un exceso de glucosa y fructosa dentro del cuerpo, por lo que puede ocasionar enfermedades crónicas como diabetes o hipertensión. Si se deja de consumir el azúcar por un mes, esto ayudará al hígado a estar más sano.
Tal como lo señala la experta en nutrición Fernanda Alvarado, el exceso de azúcar en alimentos como refrescos, panes, alcohol y golosinas provocan con el tiempo un hígado graso, que junto a la inflamación de este órgano puede causar fibrosis o cicatrización del mismo.
CUIDA LA PIEL
Al disminuir el consumo de azúcar, esto hará a tu cuerpo en la producción de colágeno, algo que evita el envejecimiento prematuro de la piel y por ende te verás mucho mejor. Se sabe que el azúcar daña la piel por disminuir la cantidad y calidad del colágeno en un proceso que se conoce como glicación.
BENEFICIA AL SISTEMA DIGESTIVO
Si se elimina el azúcar de la dieta diaria, esto beneficiará enormemente al proceso de digestión y a la absorción de los nutrientes. Tanto la grasa como el azúcar fomentan el crecimiento de bacterias malas dentro del intestino provocando algunas enfermedades. Lo mejor es fomentar una microbiota intestinal saludable limitando el consumo del azúcar.
REDUCCIÓN DE LA GRASA ABDOMINAL
Aunque parezca mentira, el azúcar también favorecerá al tamaño del abdomen reduciéndolo al evitar que el exceso de grasa se quede en tu cintura. Nuevamente la especialista Alvarado señala que el “exceso de azúcar provoca que el cuerpo produzca más insulina y el exceso de insulina en el cuerpo se convierta en grasa”.
PROTEGE EL CORAZÓN
Evitar el consumo excesivo de azúcar también protege la salud del corazón, ya que favorece el balance del oxígeno evitando así problemas cardiovasculares.