Al hablar de depresión, lo primero que se nos viene a la mente es una persona triste y decaída. En estos casos, resulta más sencillo ayudarla, pues sus señales de alerta son evidentes. Sin embargo, existe otra cara de la moneda de la que se conoce muy poco y es la temida ‘depresión sonriente’.
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Si bien no es un diagnóstico en sí y no está dentro de los trastornos mentales, es un término conocido porque mucha gente lo padece, sobre todo después de la pandemia del Covid 19.
“Es difícil de diagnosticar porque esas personas ocultan sus emociones. Sienten que demostrar signos de tristeza es debilidad. Siempre están sonrientes, felices y todo en su vida va aparentemente bien”, comenta la psicóloga Fabiana Paz, de la Universidad César Vallejo.
Aunque quisiéramos identificar los síntomas más comunes y ayudar a nuestro familiar o amigo que esté pasando por eso, la especialista asevera que cuando se trata de condiciones psicológicas, es el paciente quien debe darse cuenta por sí solo. “Como son tan hábiles para no demostrar sus verdaderas emociones, ellos solos deben dar el primer paso y pedir ayuda”, agrega Paz.
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SEÑALES
Sin embargo, algunos signos de alerta podrían ser perfeccionismo al 100 %, frustración cuando se comete errores, felicidad exagerada y se repiten constantemente que su vida tiene que ser perfecta y hacen lo que sea para lograrlo.
Estos impulsos suelen confundirse con motivación y ganas de prosperar, pero en el caso de los que padecen ‘depresión sonriente’ se nota que su conducta es fingida y exagerada.
“Como entorno, debemos escuchar activamente a nuestros familiares y amigos. Lamentablemente, con la magia del Internet, ya nadie presta atención al otro”, indica la especialista.
SABÍAS QUE...
Este sábado 10 de setiembre se conmemora el Día Internacional para la prevención del suicidio. Fecha que busca concientizar sobre los trastornos de salud mental y dar una luz de esperanza.
Recuerda que no estás solo en este proceso. Aun cuando lo más difícil es dar el primer paso y aceptar la enfermedad, tienes personas a tu alrededor que te ayudarán a superarla.
Si eres familiar o amigo de una persona con depresión, respeta su espacio y no seas invasivo, pero sí asegúrate de hacerle saber que siempre estarás disponible para ella.
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