Cuando estabas en un lugar caliente y luego salías al aire libre sin abrigarte, de seguro escuchaste que alguien te decía: ‘Abrígate que te puede dar una neumonía’ y, aunque parezca una exageración, tiene mucho de cierto, ya que al cambiar bruscamente de temperatura las defensas de nuestro cuerpo bajan y se puede llegar a padecer esta infección respiratoria.
El neumólogo del hospital Guillermo Almenara y vocero de la ONG ‘Una Vida por Dakota’, Rubén Huamán, explica que la neumonía es una infección del tejido pulmonar producida por diferentes gérmenes, virus, bacterias y hongos.
“La más común es el neumococo, una bacteria que se encuentra en nuestras vías nasales y que cuando se infecta nos produce diversas enfermedades y una de ellas es la neumonía que puede ser mortal”, explica.
SÍNTOMAS
Los síntomas en los jóvenes y adultos son: fiebre constante, tos y dificultad para respirar, mientras que en los adultos mayores son todos los mencionados, más la pérdida de apetito, excesiva somnolencia, malestar general, e incluso se pierden las fuerzas para estar de pie.
Por ello, el especialista aconseja que siempre nos lavemos las manos y abrigarnos lo necesario (sin exagerar porque el sudor puede mojar las prendas y enfermarnos).
También es importante que si tienes tos o algún malestar no acudas al trabajo para no contagiar ni que te contagien.
Sabías que...
Los mayores de 60 años pueden vacunarse gratis contra la neumonía en los establecimientos de salud.