La pandemia ocasionada por el coronavirus dejó consigo una especial preocupación por la salud en el día a día. Así, información de Ipsos del 2021 reveló que el 34% de los peruanos realizaron más ejercicios durante el confinamiento; al menos el 10% disminuyó su consumo de alcohol y un 7% dejó de fumar. De la misma manera, miles de peruanos optaron por contar con un seguro de salud personal o familiar.
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“A raíz de la pandemia, muchos hogares notaron la necesidad de contar con un seguro que les permita atender eventos médicos que en situaciones de crisis no pueden ser atendidas por el sistema de salud público. Aún con un impacto económico que reducía los ingresos de miles de peruanos, la salud se convirtió en una prioridad en los gastos mensuales de las personas”, indicó Karla Mori, gerente comercial de Sanitas Perú.
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Similar a un seguro de salud individual, un seguro familiar busca brindar atención médica en diversos momentos en que la persona lo necesite: sea con atención ambulatoria, emergencias, u otros. Este tipo de seguros se caracteriza por cubrir a más de un miembro de la familia, brindándoles los mismos beneficios a todas las personas que pertenezcan a este seguro familiar; convirtiéndose en la mejor opción para aquellos padres que también quieran brindar un seguro de salud a sus hijos.
“La pandemia ha permitido que la oferta de seguros de salud se incremente, existiendo alternativas que permiten customizar las coberturas, brindándoles un servicio más personalizado y ajustado a sus necesidades; una ventaja que las familias pueden aprovechar para complementar otros seguros con los que ya cuenten”, agregó Mori.
Actualmente, existen diversos tipos de seguros de salud, que permiten que el usuario escoja entre uno o más tipos de cobertura; brindando solo consultas ambulatorias o solo atención para emergencias; cobertura oncológica o enfermedades graves; ofreciendo programas preventivos o atenciones hospitalarias, etc.
Teniendo en cuenta que cada familia tiene necesidades y realidades distintas, la clave, indica la especialista, es conocer bien las necesidades que cada una tenga y tomar una decisión en base a ello.
“Es necesario entender, en principio cuales son nuestras necesidades y tener en cuenta qué planes a futuro tiene nuestra familia. Sobre ello, debemos evaluar los pagos que se debe realizar en las clínicas o centros afiliado al que queramos acudir al hacer uso del seguro o plan de salud; las distintas coberturas que se ofrecen y los beneficios gratuitos que por ley corresponden a los pacientes en algunos planes de salud No importa la clase de seguro de salud que uno escoja: el mejor seguro de salud será aquel que una persona haya tomado, pues solo así podrá protegerse y proteger a su familia”, finalizó la ejecutiva.
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