BRAYAN (30).- Estimada doctora Carmen, soy un fiel lector de su columna y le agradezco por unir a los corazones solitarios. He tenido una vida muy triste porque desde muy joven tuve que atender a mis hermanos menores y a mi madre. Con el tiempo conocí a una mujer muy hermosa, a quien le detectaron una mortal enfermedad. Yo la cuidé, pero falleció. Recuerdo que caí en una fuerte depresión; sin embargo, ya pasaron tres años y creo que es el momento de pensar en mi felicidad al lado de otra dama. Quisiera que tenga entre 23 a 32 años, sea sincera y honesta. Llamar al: 963-595-757.
Mira hijito: Me alegra que hayas superado el doloroso momento que te tocó vivir y ahora todo sea parte de un recuerdo. Te aconsejo que te tomes tu tiempo antes de entregar tu corazón, conoce bien a la señorita que se comunique contigo. Ofrécele una amistad y luego, si es posible, formalicen una relación. Suerte.
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