El verano invita a la mayoría a buscar zonas, donde puede conectarse más con la naturaleza y alejarse del bullicio de la ciudad. Por desgracia, los insectos pueden malograrles la diversión.
Los síntomas normales de la picadura de insectos son: dolor localizado, enrojecimiento, picazón y a veces se puede experimentar una sensación de hormigueo.
FORMAS DE PREVENCIÓN
Betty Sandoval, dermatóloga de la Clínica Internacional, aconseja:
1. Si no tiene repelente, no se preocupe ya que este puede provocar dermatitis de contacto o algún tipo de alergia.
2. Si lleva bebidas azucaradas, tápelas bien. De esta manera, no atraerán la atención de los insectos.
3. Unte la piel con lociones caseras. Disuelva una cucharada de vinagre en una taza con agua y pase esta preparación por sus brazos y piernas. También puede mezclar una cucharadita de bicarbonato de sodio en un poco de agua y ponerla sobre la piel.
4. Prenda un espiral o vela aromática para que el olor aleje a los insectos.
5. Use prendas en tonos caqui y beige (se ha demostrado que ahuyentan a los insectos), y evite los matices floreados o muy llamativos.
¡YA ME PICÓ!
Si ya se produjo la picadura según la experta, no rasque la zona afectada ya que puede causar una infección. Lo correcto es lavarse con agua y jabón (glicerina o para bebé) y secarse. En caso de que la picazón sea intensa, aplique hielo envuelto en un paño o gasa limpia. Otra buena opción es poner un poco del gel de la sábila (reduce la hinchazón).
Si la persona que fue picada tiene dificultad para respirar, dolores y vómitos, debe acudir al centro médico para su rápida atención.
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