Cumplir 30 años marca el inicio de una nueva etapa en la vida, que también implica prestar más atención al cuidado de la salud. Por ello, aunque no haya síntomas, es recomendable hacerse chequeos médicos regulares para detectar a tiempo posibles enfermedades.
La doctora Elizabeth Ybañez, directora del Policlínico Chincha de EsSalud, recomienda una serie de pruebas básicas para esta etapa de la vida: exámenes de sangre como hemograma, glucosa, perfil lipídico, que mide los niveles de grasa en la sangre, y urea-creatinina, que evalúa la función renal. También sugiere análisis de orina y chequeos para detectar enfermedades cardiovasculares o diabetes.
En el caso de las mujeres, aconseja realizarse exámenes ginecológicos, el Papanicolaou y, si hay antecedentes familiares, una mamografía. Para los hombres, recomienda añadir el examen de antígeno prostático específico (PSA), que permite descartar el cáncer de próstata.
Ybañez advierte que cada vez es más común que enfermedades crónicas como obesidad, diabetes e hipertensión aparezcan a edades tempranas. Lo preocupante es que estas últimas no suelen presentar síntomas en sus etapas iniciales, lo que las hace aún más peligrosas.
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