Para cumplir tus metas no tienes que resignarte a comer mal y mucho menos a sacrificar tus necesidades. Puedes crearte el hábito del ahorro sin afectar tu calidad de vida si estableces prioridades y diferencias entre deseos y lo básico para vivir (alimentación, movilidad, salud, domicilio, servicios).
El economista Walter Tenorio afirma que los primeros pueden ser postergados, pero los segundos no, pues si creas un plan de ahorro estricto en el que sacrificas elementos básicos de tu vida, no podrás sostenerlo en el tiempo y dejarás de ahorrar. Por ello, el especialista aconseja:
Empezar cuando quieras: No necesitas que sea lunes, domingo o primero de mes para empezar a ahorrar. Simplemente toma la decisión de hacerlo cuando tengas la voluntad real de hacerlo.
Ser realista: Toma conciencia de tus posibilidades de ahorro de acuerdo a tus ingresos. Haz tu presupuesto para que sepas hasta qué punto es bueno apretarte más o puedes ser más flexible.
Tener montos progresivos: No te estreses al establecer un monto fijo de ahorro. Empieza con algo básico y ve aumentando según cómo te acomodas con tu nuevo presupuesto.
Valorar toda la plata: No menosprecies los pequeños montos de dinero que puedas ahorrar, así sean 10 soles, estos te permiten crecer.
Abrir una cuenta en el banco: Si tienes tu plata guardada en el colchón, podrías empezar a gastarla. Ponla a plazo fijo en alguna entidad bancaria, eso te permitirá tenerla como intangible (que no puede tocarse).
Mentalizar: Tener claro qué quieres hacer con ese dinero ahorrado te motivará a no despilfarrarlo ni deprimirte por los sacrificios que puedas hacer.
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