
¡Eran su sombra! Lucy Cabrera llegó al pódcast ‘Café con la Chevez’, donde narró el tratamiento que atravesó por el caso Max Álvarez, pero también recordó cuando los ‘urracos’ de Magaly Medina la seguían por todos lados hasta en los baños de su universidad.
Como se recuerda, la artista décadas atrás denunció por violación sexual al fallecido médico, Max Álvarez. A partir de esta demanda, surgieron más acusaciones en su contra, y con el tiempo, el sujeto fue condenado por abuso sexual y delitos contra la vida, vinculados a su labor en un centro de cirugía plástica en Miraflores.
Aunque el sujeto murió en la cárcel en el año 2012, la exvedette confirmó en su momento que su deceso, le provocó una sensación de alivio profundo a pesar de que ya lo había perdonado.
Lucy Cabrera sobre los ‘urracos’
En su entrevista con el pódcast ‘Café con la Chevez’, Lucy Cabrera recordó cuando Magaly Medina y sus periodistas, estuvieron muy pendientes de ella por el caso de Max Álvarez. Sin embargo, la artista resaltó que solo fue por rating para el programa de la ‘Urraca’.
“Por el caso Max Álvarez, me apoyó, pero fue por rating. Yo me expuse el caso y qué bacán, sentí el apoyo. Me apoyó a mí como persona, cuando yo estuve detenida, Magaly me mandó libros, una torta de chocolate, fruta con Kurt. Pero cuando terminó, fueron como cuatro meses de titulares, los urracos me iban a buscar a mi casa”, detalló inicialmente.

“Me chalequeaban, me llevaban a la universidad. Yo feliz, porque tenía chofer para todos lados, me esperaban. Entraban a mi salón, se sentaban ahí como estudiantes, porque yo estudiaba en esa época. Hasta el baño me perseguían”, agregó sorpresivamente.

¿Qué más recordó Lucy Cabrera?
Por otro lado, Lucy Cabrera resaltó que los reporteros de Magaly Medina no le dejaban hablar con otros medios, pues estuvo en un conocido hotel para evitar que brindara declaraciones.
“Una vez llegaron del programa de Ricardo Belmont, porque querían entrevistarme y me dijeron: ‘No, no vayas ahí que no tiene rating’ y la chica también entró hasta mi salón. Me perseguían hasta el baño con tal que no me vaya con el otro canal (...) Me instalaron en un hotel para que no hable con nadie de la prensa”, finalizó sobre el tema.










