POTENTE. Génesis Tapia decidió abrir su corazón para el podcast de Trome ‘Café con la Chevez’ y contar detalles inéditos sobre la relación que mantuvo con el empresario Carlos González, dueño del Tumbao quien hace unos meses falleció. La exbailarina y abogada confesó sus excesos con sustancias (droga) y el alcohol.
“Sí, me refugié (en las sustancias y alcohol), en ese entonces yo estaba en una relación con Carlos González y él tenía una vida nocturna muy activa y trataba de seguirle el paso, eso lo único que hizo fue empeorarme. Era una relación muy abusiva, era complicado porque era una chica que no se quería, no tenía amor propio, entonces cuando me humillaba o me insultaba o aceptaba ser parte de la escena que quería montar Carlos González”, dijo.
En ese sentido, Génesis Tapia reveló que el fallecido empresario facturaba también con la relación que había tenido con Vernis Hernández. Según explicó, le convenía que se hable que Génesis se metió en el mencionado romance.
“A él le funcionaba económicamente que Vernis saliera a hablar cosas falsas, ella decía que estaba con Carlos y Carlos vivía conmigo, o íbamos a un evento del Tumbao y como había esta confrontación toda la prensa estaba, pero la verdad que ella se iba con sus amigos y yo me iba con Carlos, pero al día siguiente ella decía que estaba con él”, acotó.
En esa línea, Génesis Tapia calificó como “terrible” la relación sentimental que mantuvo con Carlos González. Explicó que todo fue porque permitió maltratos que estaba acostumbrada desde su niñez. Además, volvió a negar que jamás le quitó la pareja a la salsera. Vernis Hernández.
“En ningún momento, ellos ya estaban separados. Llegó a funcionarle tanto eso a él, la prensa estaba entretenida en ese entretelón de amores, y le funcionaba entonces a él poco o nada le importaba lo que yo sentía, porque yo era tratada desde pu... a zo... Esa etapa de mi vida fue terrible porque ya no solo eran los insultos de él y los de mi niñez sino que ahora la gente, la sociedad comprándose una historia que no era real y atacándome de la peor manera. A veces me preguntan por qué te dejabas golpear o insultar pero no comprenden que la persona que pasa por abusos es una persona que no tiene amor propio, ese tipo de humillaciones no eran nuevas. A partir de eso marcó un antes y un después, el nacimiento de mi hija y conocer a Dios de la manera tan hermosa que lo conocí”, acotó.
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