La Chola Chabuca recibió a Trome en el directorio de América Televisión para hablar de los 30 años que cumple moviendo las polleras por todo el Perú y el extranjero, y de cómo su creador, Ernesto Pimentel, hacía ‘chanchita’ para sus pasajes y el duro momento que vivió cuando tuvo limitaciones físicas. Además, habla de su gran amor: el Chato Grados.
Ernesto, la Chola cumple 30 años…
¡Sí! Y tú sabes que hacía la chanchita para pagar mis pasajes y llegar a mis shows. Le agradezco a Dios por llegar a estos 30 años con las ganas de seguir renovándome, seguir creciendo.
La Chola ha pasado por etapas difíciles.
Un momento muy difícil fue antes de operarme de la cadera, también se me fracturaron dos costillas. No podía hacer nada, mi movilidad se redujo al mínimo. A veces las personas son un tanto crueles. A mí no me molestó nunca mi bastón, lo volvería a usar sin problemas, pero dolía mucho…
Las burlas…
No sé si las burlas, pero es el hecho de asumir que tienes una situación de limitación que tienes que enfrentar. Yo no me voy a dar por vencida, me dolía un poco, pero ahí estaba yo chambeando.
El Chato Grados se convirtió en tu esposo…
El Chato Grados aportó a mi vida un mundo que admiro, es el mundo huancaíno, el mundo del folklore. Él me llevó a recorrer todo el Perú, este hombre de Atacocha me enseñó mucho. Siempre lo recuerdo y parte de mi stand up es por qué me casé con él. Yo tenía dos opciones: Christian Meier y el Chato Grados (ríe). Entre Chabuca de Meier y Chabuca de Grados, yo preferí el segundo.
Cuando se ‘casaron’ fue una cosa espectacular…
Fue un boom. Fuimos el programa más visto de la televisión, llenamos la Concha Acústica del Campo de Marte. Pepe Vásquez y Lucila Campos fueron mis padrinos de la boda civil, y de la religiosa, Rulito Pinasco y Yola Polastri.Y o nunca me he olvidado de quienes, en algún momento, han tocado mi vida como Manolo Rojas, Arturo Álvarez...
Y que te han dado la mano…
Por supuesto, porque ellos se juntan y hacen ‘Los amigos de la risa’, con Arturito Álvarez y Alfredo Benavides. Siempre vivo agradecido con ellos…
La Chola hará su aniversario este 14 de febrero, ¿pero cuál será el plus de esta celebración que será la escena final de tu película?
Empezamos a las 3 de la tarde, habrá un show completo de Daniela Darcourt, estarán Deyvis Orosco, Azucena Calvay, Marisol, Orquesta Candela, Armonía 10, el grupo Guinda. Luego viene el show de mis invitados y después el de la Chola Chabuca, que será como stand up comedy, donde contaré mis anécdotas de amor con el Chato. Eso me dará pie para hablar del amor y amistad. Sortearemos amortiguadores, lunas polarizadas y una noche en el hotel Good Time.
El amor es muy frágil, ¿no?
Yo no creo en la fragilidad del amor, creo en la fragilidad de las personas. El amor es fuerte, las personas son las que se desencantan del amor.
Porque no deciden bien…
A veces no entendemos que el amor tiene también un componente del alma, no nos damos cuenta de que no solo lesionamos a las personas, sino también su alma. Toda la vida he acompañado a Christian Domínguez y le tengo cariño, pero ahorita mi solidaridad es con Pamela. Está bien que él abrace este dolor y bien hecho que le duela. Si en algún momento él quiere hablar sabe que cuenta conmigo, igual Pamela. Yo no sabía que el programa que íbamos a grabar sería la última vez en la que ellos estarían juntos. Yo para él deseo que encuentre un momento para sí mismo y te aseguro, no quiero que mis palabras las malinterpreten, he dicho que este momento que está pasando Christian es terrible, pero no quiere decir que no sea por su culpa.
¿Y la Chola conseguirá el amor?
Sigo en la lucha. El Chato es una historia en mi vida. Te voy a contar, he encontrado a alguien que cuando lo presente el Perú entero se va a sorprender.
Nada de good times…
Va a ser un long time.
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