Tilsa Lozano se ha propuesto, ahora que ‘Miguel Hidalgo’ ya no comparte su vida como pareja, trabajar para sus hijos y seguir creciendo como empresaria. Y aunque nuevamente esté cantando ‘Soy soltera’, asegura que no le ha cerrado las puertas al amor, pero eso sí, piensa aplicar toda su experiencia de vida para que ningún hombre la vuelva a ‘tontear’.
Tilsa, te veo completamente liberada...
Estoy tranquila, me corté el pelo y me creció la vida.
Pero la vida tiene momentos buenos y malos, de estos, ¿qué es lo que más atesoras?
A mis hijos, definitivamente. Mucha gente me dice: ‘esta vez te veo más tranquila, no sufres’, pero no es que no sufra, lo que pasa es que cuando tienes dos hijos no te tumbas a la cama a llorar. Con los años uno va creciendo y madurando, una persona que sufre a los 25 no es la misma que a los 35, para eso sirve la vida, para ayudarte a tener la mente un poco más fría.
¿Le vas a cerrar las puertas al amor?
¡Nooo!, pero ahorita en lo que menos pienso es en el amor de pareja, solo pienso en el amor de mis hijos, en mis negocios y en salir adelante. Sin embargo, imagino que en el futuro llegará pues, ¿no?
Algunas mujeres que pasan por tu experiencia dicen: ahora solo me dedicaré a mis hijos...
No, ¿por qué? Ya llegará, estoy joven.
¿La ‘mercadería’ todavía sale?
¡Claro! Sale como pan caliente.
Cómo has hecho para reinventarte, porque a los 25 y 35 igual se sufre...
Creo que todo es cuestión de decisión. Hay que decidir qué haces con tu dolor, te tumbas a llorar o vives. La mente es la que te va a traicionar, entonces ahí es cuando debes mirarte al espejo y quererte.
Pero no me vas a decir que no has llorado...
Por supuesto que he llorado, porque no soy de fierro, pero lloras dos, tres días y luego hay que seguir adelante.
¿El amor se acaba de la noche a la mañana?
A Miguel lo sigo queriendo, amando como el padre de mis hijos. Él es y será siempre mi familia, tenemos una buena relación como padres.
¿En esta relación sientes que diste más?
Uno da lo que le nace dar y a la otra persona igual y, a veces lo que te dan no es lo que necesitas y viceversa. Creo que no necesariamente en una relación de pareja falla uno solo, fallan ambos.
¿Y te has hecho ese análisis? ¿En qué fallaste?
Sí, pero pensar en el pasado es por las puras, porque ya pasó y no se puede cambiar. Lo único que puedes sacar del pasado es la lección para no repetir los mismos errores.
Supongo que ahora que estás sola deben llegar mensajes e invitaciones para salir.
Aunque no lo creas, no. Creo que los hombres me tienen pánico.
¿Cómo te van a tener pánico?
Te lo juro, mi teléfono no suena.
Tal vez te ven muy segura.
No sé, lo que pasa es que soy cortante. Los hombres me han ‘huev...’, pero también reconozco que soy jodida.
¿Tenías un proyecto de vida con Miguelón?
Sí, es que cuando tienes una familia proyectas casarte, tener hijos, pero seguimos siendo familia y eso lo tendrán que entender nuestras próximas parejas, porque estamos unidos por nuestros hijos.
Dices que los hombres te han fallado, pero tienes experiencia...
Mira, cuando uno se enamora, se enamora.
Como que se vuelve tonta, ¿no?
Sí, el amor es ciego, eso es literal.
¿En el futuro ya no piensas casarte?
Con él (Miguelón) ya no ja, ja, ja.
Nunca digas nunca...
No sé, pero ahorita es imposible y si me caso con alguien tendrá que ser muy especial, porque mis hijos son mi prioridad. Mi hijo tiene 5 meses, qué voy a pensar con quién salir.
Pero te he visto divertirte en ‘Barrio Latino’.
Claro, puedo salir a divertirme con mis amigos, con eso no hay problema, pero involucrarme en una relación, no hay forma.
¿Qué es lo que más te disgustó de tu separación? Porque en redes te atacaron y se burlaron bastante de ti...
Cuando leo ese tipo de cosas, me da pena lo enferma que está la sociedad, llena de odio y su mente retorcida, pues entran a una red para atacarte. Te lo juro, por mis hijos, que no me afecta lo que puedan poner en una red social...
¿No te afecta que te digan que fue el karma el que te cayó?
No, la verdad. Me preocupa lo enferma que está la gente.
¿Sabes perdonar?
Sí. He perdonado a todos porque al final la vida me ha demostrado que todo se paga aquí y cada uno está cómo y dónde tiene que estar.
La vida y el karma...
La vida se encarga, las cosas buenas pasan, las malas también, ¿para qué guardar rencor en mi corazón?