Dentro de la historia de las películas de Batman, la interpretación que hizo Heath Ledger de “Guasón”, que duda cabe, es la más recordada y galardonada. La performance del fallecido actor le valió un Óscar postúmo y hasta el día de hoy su actuación sigue siendo comentada. A propósito de ello, te comentaremos un detalle que es posible ya te hayas dado cuenta, ¿por qué el “Joker” solía lamerse los labios durante la película?
La saga de filmes de Batman dirigida por Christopher Nolan tuvo su pico de fama con la segunda entrega: “El caballero de la noche”, cinta en donde el papel de Guasón -”Joker”, en inglés- tuvo un protagonismo grandioso.
La actuación de Heath Ledger, quien se quitó la vida en enero de 2008, ha sido motivo de halagos desde entonces y por algo se llevó una estatuilla dorada a Mejor Actor de Reparto. En ese sentido, sigue habiendo algunas curiosidades respecto al desempeño laboral del artista que continúan llamando la atención.
“I Am Heath Ledger”, una película estrenada en 2017, sirvió para rendir tributo al actor y también para hablar sobre su trabajo en la gran pantalla. En él aparecen diferentes personas que han formado parte de la vida de Ledger y uno de ellos es Gerry Grennell.
El “coach” de interpretación y voz en “El caballero de la noche” resolvió el misterio sobre la lengua de “El Joker”. Según Grennell, Ledger odiaba pasar por la sala de maquillaje para que le pusieran las cicatrices del villano. Y, como suele ocurrir con este tipo de prótesis, se iban despegando a medida que movía la boca para hablar. La única solución era volver a pasar por maquillaje.
No obstante, para evitar tener que estar otros 20 minutos o media hora esperando a que se las volviesen a colocar, Ledger se lamía los labios para mantener el pegamento húmedo. Esto pasó a convertirse en un tic nervioso que incorporó a su actuación, y le dio un rasgo sicótico distintivo.
Tras su repentina partida surgieron problemas entorno a su testamento, pero tras discernir ciertas dudas y rumores, el patrimonio cifrado en casi 20 millones de dólares fue a parar a Matilda, que quedó bajo la custodia de su madre Michelle Williams, con quien vive en la actualidad en Nueva York junto a su último esposo, el director Thomas Kail (44), con quien tiene otros dos hijos más, Hart (2) y un bebé de casi tres meses.
Matilda siempre ha mantenido un perfil social bajo porque su madre la ha protegido del acoso de los paparazzi. A diferencia de otros hijos de celebridades, la joven tiene una vida normal, es una estudiante aplicada y no se ha metido en jaleos. Una de sus grandes pasiones es el ajedrez, al que también era muy aficionado su padre.
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