¡Emprende Trome! La percepción de la factura electrónica por parte de las empresas de todo el mundo es paradójica: la realidad ha demostrado que no solo mejora los negocios en múltiples áreas, sino que, además, permite ahorrar dinero, mejorando la rentabilidad de las empresas. Sin embargo, a los Tromes les cuesta adoptar esta tecnología tan beneficiosa para su actividad.
Para derribar estas barreras, la empresa SERES, especializada en este rubro, ha identificado 10 razones que hacen de la factura electrónica uno de los mejores aliados de cualquier negocio.
1. Reducción de los costes de facturación: La emisión electrónica de facturas permite un ahorro estimado del 67%, ya que se reducen los costos en la manipulación de papel, el recuerdo de los pagos, la gestión de la tesorería, el archivo de los documentos, etcétera.
2. Reducción de los costes de gestión de facturas (coste/factura): La emisión de facturas en Perú tiene un coste por unidad de 16,14 soles cuando se realiza en papel y de 5,95 soles cuando se utiliza el formato electrónico. La diferencia es mayor cuando se trata de recepción de facturas, que pasa de 26,19 soles en papel a 8,23 soles en formato electrónico.
3. Ahorro de almacenamiento: Puede parecer banal cuando se libera el contenido de un cajón o un archivador, pero, al extenderse a toda una empresa, puede permitir la mudanza a un espacio más reducido y el consiguiente ahorro en alquiler y suministros. Se estima que el ahorro por archivo electrónico es 81%.
4. Reducción tiempos: acortar los ciclos de tramitación, incluido el cobro. La facturación electrónica acorta los tiempos de entrega de las facturas y reduce todo el proceso de pago entre empresas o entre usuarios y empresa. En emisión, se estima que el tiempo manual dedicado a la creación, impresión, manipulación y ensobrado, envío y archivo por factura en papel es de 1 minuto y 33 segundos; mientras que, con la factura electrónica, el tiempo de creación, envío y archivo pasa a ser de 30 segundos.
5. Reducción de errores: La factura electrónica no tiene errores contables y si los tuviese el sistema las rechaza. Esto hace que se reduzcan los errores humanos y que sea mucho más cómodo manejar grandes volúmenes de facturas.
6. Eliminación de tareas rutinarias: Por cada 20 facturas emitidas se ahorra más de media hora de trabajo mientras que, por el mismo volumen, en recepción se ahorran 3 horas.
7. Ahorro medioambiental: Cada millón de facturas en papel precisa de 10.000 kg de madera. Al pasar al formato electrónico, ese millón de facturas evita la tala de 56 árboles y se reduce un 0,72 Tm emisiones de CO2.
8. Aumento de la seguridad: La factura en papel puede ser copiada, escaneada, puede perderse durante el envío, puede ser modificada sin notificárselo al emisor, mientras que la factura electrónica está cifrada con contraseña, se envía directamente del emisor a la SUNAT y al receptor a través de redes seguras, contiene la firma electrónica que impide modificaciones.
9. Mejora de la imagen financiera: Al reducirse el coste de la operación de factoring sin recurso, esta puede ser más ampliamente usada como un instrumento de mejora de la imagen financiera. Al permitir convertir en balance cuentas a cobrar en liquidez, automáticamente mejora los ratios relacionados con la liquidez y solvencia, claves en la imagen financiera que mostramos ante terceros.
10. Mejora de los resultados: La factura electrónica disminuye el DSO o periodo medio de cobranza. Si además se recurre a la financiación sin recurso de parte de esas facturas esa disminución será mucho más fuerte. Menos DSO implica automáticamente menos necesidad de financiación del Working Capital
Ya los sabes Trome, si no lo has hecho ya, es hora que empieces a convertir tus sistemas para operar con facturas electrónicas.