¡Emprende Trome! Te preguntaras qué es el ROI. Es simple, son las siglas en inglés del concepto Retorno sobre la Inversión, que se refiere, en el campo de la inversión en publicidad, a la recuperación de la inversión que hiciste en términos de alcance. Es decir, si invertiste S/100 en 100 volantes, te costó S/1 llegar a cada persona. En cambio, si pagas S/100 para que un animador anuncie tu negocio en el mercado del barrio, donde circulan por las mañanas alrededor de 500 personas, te costó S/0.2 por persona. Se trata de una herramienta bastante útil para medir el impacto de tu gasto en promoción.
Calcular en la web
Por otro lado, dependiendo del tipo de retorno que buscas de tu inversión, deberás emplear diferentes estrategias para optimizarlo. Imagina que vendes una silla cuyo costo de producción es de S/50 soles, y por venderlo en una tienda online será de 100 soles. Para venderlo, decidiste invertir S/100 en AdWords -programa de la empresa Google que ofrece publicidad-. El resultado: vendiste 6 unidades. El total de ingresos obtenidos por la venta del producto será de 600 soles.
En este caso, para calcular el ROI, tendríamos que restar de los ingresos (S/600) los gastos de producción de las 6 unidades (S/300), a los que se suman la inversión en AdWords (S/100). Ese resultado debes dividirlo entre los gastos de AdWords sumado a los costes de produccióny multiplicarlo por 100. La formula es sencilla.
Este resultado sería signo de que la inversión en AdWords que acabas de hacer sería rentable, ya que con esta campaña los ingresos son mayores que los gastos, por lo tanto estamos generando beneficios.
A continuación te damos 5 consejazos para que mejores el ROI en tu negocio.
1.- Cuida tu ortografía. Enviar un email pobre de contenido y con errores gramaticales podría arruinar la reputación de tu empresa. Es necesario, tomarte más tiempo o buscar expertos que pueden asesorarte para escribir un contenido fuerte e impactante, para conseguir clientes.
2.- Lleva un registro. Implementa un sistema de gestión de aprendizaje que registre los datos críticos y que se adapte a los cambios de sus necesidades. Es como llevar una contabilidad de los gusto de tu público objetivo, sus preferencias, los canales que más usan, entre otros.
3.- Se selectivo. Estudia los resultados de tus campañas en las redes sociales y concéntrate en las plataformas que te brindan mayores resultados. Para ello debes determinar cuáles son las redes que tu público objetivo utiliza más y en base a esos resultados enfoca tus esfuerzos.
4.- Capta a tus potenciales clientes. No puedes permitirte el lujo de olvidar la personalización. Sin ella, no podrás establecer vínculos para una relación comercial duradera entre marca y cliente. Debes saber quiénes son tus posibles clientes y darles continua información.
5.- Darles calidad de contenido. No puedes limitarte a intentar vender tus ofertas y cualidades con contenidos estrictos exclusivamente sobre sus productos. Debes saber, para afinar el enfoque de tus contenidos, qué es lo que realmente demandan tus diferentes seguidores.
Todo indica que las plataformas virtuales llegaron para quedarse y han sido adoptadas por las empresas de manera inmediata, en algunos casos, de mejor forma que en otros. Ahora toca sacarle provecho.