Jóvenes colombianos preparan y venden un delicioso salpicón (refresco de frutas) en Los Olivos.
Colombianos

Para los peruanos, la raspadilla es buenísima para aplacar la sed del verano, pero para los colombianos es ideal un rico salpicón, un delicioso refresco de frutas que Lorena Ochoa (21) y Santiago Velasco (21) se encargan de vender en las calles del distrito de Los Olivos.

Para nosotros un salpicón es una entrada fría de pollo con verduras, pero ¿para ustedes es un refresco?
Lorena: Sí. Es un refresco-postre típico de Colombia. Es como batido hecho de ocho frutas: mango, papaya, plátano, manzana, melón, sandía, naranja y piña.

¿Y cómo se les ocurrió vender este producto acá?
Santiago: En realidad, cuando llegamos a Lima hace más de dos años, nuestra idea no fue quedarnos. Vinimos de visita. Fue mi hermano, que es novio de Lorena, quien nos metió el interés por emprender un negocio aquí.
Lorena: El problema era que no teníamos recursos, como habíamos venido por unos días, solo contábamos con 200 soles o menos en el bolsillo. Además, teníamos que dejar nuestros trabajos allá en Bogotá.

¿Qué hizo que se convencieran?
Santiago: Era época de calor y la gente consumía cremolada, raspadilla y todo lo que acostumbran aquí.
Lorena: Fue ahí que se nos ocurrió la idea de vender nuestro salpicón. Es fresco, natural y muy nutritivo. Así que fuimos al mercado con el poco dinero que nos quedaba, lo preparamos, cogimos nuestro balde y nos fuimos a la playa. El resultado fue tan bueno que dijimos: ‘nos quedamos’.

¿Y les sigue yendo bien?
Lorena: Sí, la verdad que este país nos ha sorprendido por lo bien que nos ha tratado. Estamos encantados. Hemos recibido apoyo por todos lados, formamos parte del proyecto MYPE y eso nos permite trabajar con más tranquilidad.
Santiago: Ahora estamos a punto de terminar de armar nuestro tercer carrito, con lo que cubriremos un punto más de atención.

¿Ustedes mismos construyen su carrito?
Santiago: Así es, es un trabajo en equipo. Nuestro carrito está hecho para facilitarnos el trabajo. Incluso tenemos un tachito de vasos hecho a la medida para que hasta arrojar la basura sea divertido.
Lorena: Este proyecto no solo nos ha permitido trabajar a nosotros, sino a nuestras vecinas que son amas de casa y que ahora forman parte de este equipo ayudándonos a preparar el salpicón.

¿Dónde los encontramos?
Lorena: Ahora estamos en el cruce de la Avenida Antúnez de Mayolo con la calle Orión. Y también en la entrada del mercado Covida.

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