La diseñadora Valery Zevallos de ‘Estrafalario’ empezó en ferias muy pequeñitas ofreciendo sus prendas y con una visión de crecimiento, pero cuando todo bien llegó la pandemia y la aprovechó para vender sus mascarillas que le permitieron seguir a flote. Después de dos años de arduo trabajo, ingresó a una tienda en el Jockey Plaza y exporta a Suiza, Panamá y pronto a Francia. ¿Cómo logró crecer tan rápido?, aquí lo cuenta todo.
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En el 2020, nos contaste que las mascarillas te ayudaron a mantenerte en la plena pandemia. ¿Cómo le ha ido a la marca en estos años?
Las mascarillas representaban el 70% de las ventas y lo que hicimos fue volver a las blusas y a las prendas de vestir. El día de hoy vendemos lo que realmente mueve a la marca y nos ha ido muy bien.
Estuviste en Perú Moda, ¿qué tal te fue?
Fue increíble. Perú Moda es una vitrina para exponer el producto peruano y como marca conseguir la validación de posicionamiento en el mercado local. Esta es una oportunidad para conseguir compradores extranjeros que valoran el trabajo, los insumos peruanos como: el algodón pima y el Baby Alpaca. Nos ayudó a tener contactos.
¿A qué nuevos mercados ingresaste?
Suiza, Panamá y estamos en conversación para un pedido en Francia.
Apuestas por una moda sostenible que va creciendo. ¿Cómo ves al consumidor peruano?
En Perú nos falta entender qué pasa con la industrial nacional, concientizarnos por el impacto negativo que ésta produciendo no solo en el tema de contaminación y explotación laboral, sino el daño que se le hace al rubro textil con el ingreso de productos importados.
Estás más de 6 años en el mercado, ¿qué lecciones rescatas de todo este tiempo?
Estar atenta de las oportunidades y salir a tiempo. Formar un equipo. Se dice que el emprendedor tiene la etiqueta de ‘todista’, que es a corto tiempo, pues si quieres llegar a gran escala, necesitas de un equipo consolidado y que la marca vaya de la mano con la calidad para conquistar el mercado extranjero.
¿Cuál dirías que es el éxito de Estrafalario?
Aún nos falta para el éxito, pero abrazamos todos los pasos que hemos dado. Nos diferencia la capacidad de crear productos con alma, que cuenten una historia real desde mujeres en situaciones vulnerables; internas de la cárcel, artesanas y mujeres vanguardistas del primer mundo que se identifican con la marca.
Empezaste en ferias y ahora estás en un gran centro comercial, ¿cuándo fue el momento en que decides ir por algo más grande?
Cuando estuve en La Rambla me di cuenta el nivel de rotación de las personas. Mientras que en un showroom debes buscar a los clientes, en el centro comercial los encuentras ahí. Los costos fijos son altos, pero se debe apostar por tu propuesta, el marketing, posicionamiento y calidad para retener al cliente.
¿Cómo fidelizas a tus clientes?
Nos preocupamos por la buena atención posventa, las vendedoras atienden a través de WhatsApp, envían correos con promociones, pero la mejor forma de fidelizar es con la calidad del producto, que la clienta reciba piropos lindos por su blusa bordada.
¿Cómo ves a Estrafalario en cinco años?
Internacionalmente, con dos tiendas en Europa, con puntos en Estados Unidos, Canadá, Suiza y Alemania, y una tienda en Perú. Además, de una casa para mujeres en situación de vulnerabilidad y empoderando a más personas.
¿Cuáles son las dificultades más comunes que se enfrentan los emprendedores en el mundo?
Para los emprendedores en general, la mayor dificultad es levantar capital. Los diseñadores necesitamos inversión para crear la primera colección. Deben hacer un buen plan de costeo para levantar capital, saber cuánto van a invertir y el margen que van a ganar, hay quienes quieren diseñar y no saben cuánto van a ganar.
Ahora que tus productos van a otros países, ¿cómo pueden hacer aquellas personas que quieren ingresar a mercados extranjeros?
Deben hacerse aliados de Perú Moda, Promperú, hay que ser parte de organizaciones que tienen los contactos necesarios para crecer y salir a otros mercados. Dan cursos gratis para que aprendan. Yo estuve tres años insistiendo hasta que lo logré.
Ping Pong
Estrafalario: Empoderamiento.
Moda sostenible: Trazabilidad.
Materia prima peruana: Orgullo.
Un sueño: Ser feliz.
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