Cuando entrevistamos a Carmen Seminario hace tres años, nos contó que tenía entre sus planes llegar a nuevos mercados, pero llegó la pandemia y todo quedó en stand by. En el confinamiento no paró de hacer vestidos de novias. Hace unas semanas, sorprendió a los amantes de la moda con su colección inspirada en una orquídea en la pasarela del New York Fashion Week y pronto abrirá su atelier en Chicago.
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Carmen, hace unos años hablamos sobre tus planes de llevar tu marca al exterior, ¿cómo fue ese proceso?
El proceso fue más largo de lo que pensé. Estar en el New York Fashion Week es una super ventana para el público estadounidense y para todo el mundo. En noviembre abro mi tienda estudio en Chicago.
¿Hiciste un estudio de mercado, por qué Chicago?
Tenía clientes desde antes de pandemia, los atendía a distancia, de manera virtual.
El próximo 15 de octubre será tu desfile en Chicago, pero ¿Cómo te fue en el New York? ¿Qué comentarios tuviste?
Reconocieron que es una propuesta innovadora, muy distinta a lo que se presenta en la pasarela, son muy femeninos, usables y combinables. Tengo personas que han comprado mis prendas y les encantan.
¿Cómo fue que llegaste a esta pasarela tan importante?
Este año se abrió una convocatoria para nuevos diseñadores latinoamericanos, me presenté y me eligieron.
¿Cuál es el estilo de Carmen Seminario?
Siempre ha sido un estilo femenino, romántico para mujeres más audaces y decididas. Me gusta usar cortes orgánicos con formas.
Cuéntame de tu inspiración para la propuesta que presentante en Estados Unidos…
La colección fue Cattleya, inspirada en las orquídeas, me encantan las flores y es algo que me movió. La orquídea es una flor muy hermosa, delicada, pero a la vez fuerte, pueden durar tres meses. La vi en Miami donde vivía y nació la idea de creación.
Tu marca ya es internacional, ¿qué lecciones rescatas de todos estos años de trabajo?
Pienso que uno debe buscar las oportunidades y no esperar a que lleguen. Hay continuar con lo que a uno le hace feliz, el diseño, pero también como un negocio rentable. Y entrar a plataformas que abren las puertas a otros mercados.
¿Qué tendencias están marcando el mundo de la moda ahora?
En mi colección y en si lo que se siente en el ambiente, son los colores fuertes, vibrantes en combinación. El movimiento de las telas. En mi caso, el juego de las tiras envolventes que están muy de moda. También los trajes de ternos de mujer y hombre con colores fuertes.
¿Por qué son tan importantes estos desfiles en el exterior?
El objetivo de estar en New York Fashion Week y en Chicago es visualizar mi marca y el público sienta ese respaldo del diseñador. Además, ayuda a posicionarte de una forma más rápida.
A los jóvenes que les gusta la moda, ¿qué consejos les darías?
Den lo mejor de sí, con la mejor calidad en sus productos. La recomendación es importante, detrás de cada cliente viene varios. Hay que dar la mejor atención al público. Sigan su propuesta y tengan un buen equipo de trabajo, pues les ayudará a tener una colección más aterrizada y vendible. Arriésgate a tocar puertas, confía en tu producto y en tu nombre.
En la pandemia fue duro para muchos, recuerdo que hicieron mascarillas, ¿Cómo fue que despegaste?
En la pandemia hice mascarillas de telas con diseño que las empecé a vender y levantar el ánimo a la gente. Nunca dejé de hacer vestidos de novias, quinceañeras y otras. Viajé a Estados Unidos cuando se abrieron las puertas y empecé. Hice la colección para Barrington y se me abrió las puertas para presentarme en NY.
Ahora vemos que muchos diseñadores latinos se enfocan en otros afuera, ¿cómo ven el mercado en el exterior?
El mercado a raíz de la pandemia se abrió mucho, ahora atendemos de manera virtual a los clientes de Europa y América. Además, se han abierto marketplaces que ven a Latinoamérica como una fuente de diseñadores y productos bien elaborados.
¿Y cómo se ve el diseño peruano afuera?
El Perú tiene una identidad diferente, tenemos un plus, buenos insumos, buena mano de obra con las que logramos prendas de alta calidad.
¿En qué se fijan los clientes ahora?
Depende del cliente. Si es mujer, normalmente quieren verse más sensuales, atractivas, quieren algo que realce su belleza, que las haga sentir más especiales en ese día. En cuanto a los hombres, buscan ser más elegantes y que se aprecie la calidad.
¿A dónde quieres llevar tu marca?
Abrir mi atelier en Chicago en noviembre y continuar con mi mano de obra peruana y que sea reconocida en Estados Unidos como un diseño peruano con buena calidad y que esté en el top of mind de la gente que consume moda.
¿Qué estrategia aplicas para enfrentar la crisis mundial?
Lo siento en las calles y eso aumenta mucho, los precios están más altos. Pienso en no desenfocarme del público que tengo, que son vestidos de novia y ternos que resisten a las caídas económicas. Los ternos se están usando otra vez.
¿Tus colores favoritos?
Me encantan los tonos fucsias, verdes y azules.
Ping pong
Moda peruana: alpaca.
Textiles: algodón tejido.
Carmen Seminario: Moda femenina actual.
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