Historias que deja la fecha doble de Eliminatorias Rusia 2018. Detalles que marcan un proceso. Luego del empate de la selección peruana en Maturín, ante Venezuela, el plantel arribó muy motivado a Lima. El viernes 24 de marzo llegaron por la tarde a Lima tras igualar el marcador, después de ir perdiendo 2-0.
Se dirigieron a la Videna a entrenar pensando en Uruguay. Luego, se fueron directamente a la concentración en el ‘Swissotel’ de San Isidro y en la intimidad, los jugadores de la selección nombraron una comitiva para que se acerque hasta el técnico Ricardo Gareca: “‘Profe’, queremos pedirle permiso para mañana. Después de las prácticas, queremos que nos dé libre para salir a almorzar con nuestros familiares y volveremos a concentrar en la noche. Prometemos no hacer nada malo...”, habría sido el pedido de los seleccionados.
Trascendió que Ricardo Gareca lo pensó un momento. Cuando estuvo a punto de dar su brazo a torcer, un miembro de su comando técnico le recordó los antecedentes: “No es el momento. En anteriores ocasiones pasaron cosas que desestabilizaron...”, le dijeron y el seleccionador dio su negativa al pedido.
“Muchachos, venimos jugando bien porque el equipo está al cien por ciento concentrado. Esto debe ser total. El que está convocado debe tener absoluto compromiso...”, aseguran que respondió Ricardo Gareca.
La explicación dejó satisfechos a los jugadores de la selección peruana y todo siguió como estaba establecido. No hubo permisos. Todos permanecieron encerrados. Perú le ganó a Uruguay.
Contenido GEC