Los futbolistas tienen tiempo libre luego de cada entrenamiento y cada quien es libre de realizar la actividad que les plazca, como practicar otro deporte. El argentino Rodrigo De Paul demostró que no solo puede brillar con la selección de Argentina o Atlético Madrid en la cancha, sino que también puede hacerlo con el tenis de mesa.
El habilidoso volante aprovechó de las horas de esparcimiento que tuvo ante la suspensión del partido de su club ante el Granada por LaLiga Santander y decidió jugar ping pong, como también se le conoce a esta actividad. En esta ocasión, su rival fue Damian Mercau, su amigo de confianza a lo largo de su carrera.
A pesar de la amistad que los une, Rodrigo De Paul, vestido con una casaca de la selección de Argentina, no tuvo piedad y poco a poco fue brillando con sus cualidades para el tenis de mesa. Según el video que compartió en Instagram, logró sacar una cómoda ventaja hasta quedarse con la victoria con un 7-0 contundente.
El futbolista demuestra que es un competidor en cada reto que tenga por delante y los hinchas de la ‘Albiceleste’ gozan con las cosas positivas que demuestra, tanto dentro como fuera de las canchas.
El camino de Rodrigo De Paul en Europa
La carrera de Rodrigo De Paul ha sido destacada principalmente en la Serie A de Italia, donde supo brillar con la camiseta de Udinese. El volante jugó cinco temporadas y siempre tuvo una importante regularidad en su nivel, al margen de que el club sufrió de constantes altibajos, incluso peleando en la parte baja de la tabla de posiciones.
El nivel mostrado por De Paul dejó en evidencia que necesitaba un nuevo reto y por ello fichó por el Atlético Madrid de España, liga en la que ya había jugado. Entre 2014 y 2016 formó parte de las filas de Valencia, luego de su prometedor inicio con Racing Club. No obstante, no pudo brillar, volvió unos meses al fútbol argentino y después pegó el salto a Italia.