Roberto Valenzuela en exclusiva para Trome. Foto: Allengino Quintana
Roberto Valenzuela en exclusiva para Trome. Foto: Allengino Quintana

Por las rutas picantes y sabrosas del Callao avanza un hombre que supera el 1.80 m de estatura. Carga en sus espaldas una historia dura, de lucha y errores, pero lleva orgulloso un presente de emociones, proyectos y muchas ilusiones. Roberto Valenzuela, exjugador de Universitario, Municipal, Alcides Vigo, Unión Huaral, CNI y Sport Boys, desnuda su alma y cuenta orgulloso sus resbalones. Sabe que sus experiencias sirven para encaminar a los más jóvenes.

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¿Cuánto solías gastar en una noche de juerga?

Me iba a un nigh club y ahí recibía el nuevo día.

¿Despertaste en un hotel y fuiste a entrenar?

No iba.

¿Siempre fuiste ‘travieso’?

Cuando estaba de juvenil en la ‘U’ nos fuimos a jugar unos partidos a Argentina, a la provincia de Río Cuarto.

¿Sucedió algo?

Fue en diciembre, justo para Navidad y Año Nuevo. El 24 salí a las 11 de la noche, teníamos permiso hasta la una de la mañana, pero me aparecí a las 5 de la madrugada.

¿Te castigaron?

El entrenador era el profesor Hugo Ferrarese. Me esperó en la puerta y señalándome el sillón del lobby del hotel me dijo: ‘Esta noche duermes acá’ y allí me dejó.

¿En los tiempos en que una marca de leche auspiciaba a los cremas te robaste varias bolsas?

La verdad que esa vez fueron otros, entre ellos John Galliquio.

¿Entonces por qué te ‘bautizaron’ cómo ‘Robinho’?

La ‘U’ sacó una camiseta que me encantaba, era con la marca ‘Nicolini’ en el pecho...

¿Qué hiciste?

Un día tomé una de la utilería y la metí bajo mi polo.

¿Nadie se dio cuenta?

El utilero ‘Pajita’. En la puerta me pidió que la regrese y lo hice.

¿Algún futbolista tuvo en su historia amorosa mujeres más lindas que Roberto Martínez?

Si ‘Chemo’ del Solar hubiese jugado en Perú, en ese tiempo, le ganaba.

¿Una anécdota con el ‘ex’ de Gisela?

Él fue técnico del Estudiantes–Grau y dos días antes de un partido, salgo en la noche a una discoteca. Cuando estoy entrando, veo que sale él y a su lado Édgar Ospina.

¿Qué hiciste?

Me metí debajo de un carro, pero me eché en el piso y estaba lleno de grasa.

¿Diste la cara?

Sí, solo me saludaron y me aclararon: ‘Mañana temprano a entrenar’.

¿Así sucedió?

Cuando pasó el bus que nos iba a llevar a la práctica, antes de poner mi pie en el primer escalón, me dijeron que yo tenía pasaje a Lima y quedaba fuera del grupo.

Te echaron...

Me vine y una semana después, sin hacer nada, todo el plantel llegó a Lima porque jugaban en Arequipa y tenían que trabajar en la capital.

Pero, ¿no estabas separado?

Sí, pero me enteré que Roberto y exjugadores de la ‘U’ tendrían un almuerzo.

¿Fuiste?

Entré con cara de pocos amigos y lo fui a buscar.

¿Qué te dijo?

Me vio y me abrazó efusivamente. ‘Mañana preséntate en la práctica’, fue su mensaje.

¿Te perdonaron?

Sí y en la ‘Ciudad Blanca’, con mi gol de penal, ganamos 1-0.

Tocaste a ‘Peinadito’, el asistente de ‘Robert’...

Una mala persona, además hipócrita.

¿Es verdad el mito de que se mete en relaciones de otros?

Un par de compañeros decían que iba a visitar a sus mujeres.

Cuto’ siempre te vacila en su programa...

Yo revelaré un secreto de él, pero en clave...

Adelante...

Había un Volswagen rojo manejado por ‘Harold’ y la ‘Tuta’ de La Punta. Eran un par de chicas con ‘una manzanaza’ en su cuello. A ese carro también subía un tal ‘Chino’ Huamán.

¿Quién te hizo cambiar?

Mi esposa Paola Rujel. Yo estaba mal, metido en pasos que nunca debí dar y ella fue mi fuerza.

¿Dos hermanos del balompié?

Luis ‘Cuto’ Guadalupe y Mario Gómez, un tipazo que si me ve retrocediendo en algo, me llama la atención para que no me rinda.

Ya estás en el YouTube...

Estoy con ‘La Tribuna del Vale Vale’. Tengo la empresa M&R Motors SRL, Clínica DENTALUP y Astle implementos deportivos. Pon a esos empresarios que creen en mí.

Un abrazo, Vale...

Gracias por el ‘cherry’.

DATAZO

Escuela Formativa de Roberto Valenzuela: 966434715

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