La atleta etíope Etenesh Diro acaparó los aplausos el pasado viernes en el estadio Engenhao tras su demostración del verdadero espíritu olímpico en Río 2016. La deportista perdió la zapatilla en un accidente en medio de la carrera de 3.000 metros con obstáculos femenino y decidió seguir corriendo descalza de un pie.
Faltaban solo dos vueltas para la final de la serie de clasificación a la final y Etenesh Diro estaba en el primer pelotón de corredoras cuando perdió el calzado. La atleta intentó ponerse la zapatilla pero no lo logró, siguió corriendo y luego decidió quitarse la media.
Al final, increíblemente, Etenesh Diro recuperó varios puestos pero no le alcanzó para quedarse entre las tres primeras clasificadas a la final. La etíope quedó séptima de un total de 17 competidoras y fue eliminada.
Etenesh Diro llegó a la meta entre lágrimas y al ser atendida por los médicos se negó a sentarse en una silla de ruedas. El estadio de atletismo de Río 2016 estalló en una ovación para la atleta.
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