La llegada de Paolo Guerrero a Lima fue un verdadero caos. Los agentes de seguridad nada pudieron hacer para controlar a la multitud de hinchas y periodistas que esperaron impacientes varias horas la llegada del ídolo peruano y jugador del Inter de Porto Alegre, que este miércoles enfrentará a Alianza Lima por la Copa Libertadores.
Los hinchas empezaron a gritar al ver salir a Paolo Guerrero e inmediatamente siguieron su camino. Sus compañeros del Inter de Porto Alegre jamás imaginaron que la llegada del 'Depredador' despertara tantas pasiones en suelo peruano, por ello también sufrieron para poder llegar al bus que los esperaba para trasladarlo hasta el hotel donde descansarían.
Al cruzar la puerta de recinto, la situación se volvió incontrolable y los de seguridad solo atinaron a rodear a Paolo Guerrero y otro de sus compañeros mientras intentaban llegar al bus, pero las cámaras de TV, los periodistas e hinchas mismos no dejaban avanzar al jugador, quien solo sonreía y decía algunas palabras a sus compañeros.
Minutos después del caos, Paolo Guerrero en su afán de llegar rápido a su bus tropezó y resbaló, al parecer, junto a otros fotógrafos y algunos hinchas que lo rodeaban y cayeron al suelo.
HIZO FELIZ A NIÑO
Cuando por fin llegó al bus sus compañeros no dudaron en reírse con él por el todo el escándalo que aún se vivía la parte del estacionamiento del aeropuerto, pues los hinchas rodearon la unidad y no lo dejaban avanzar.
Paolo Guerrero, en medio de la espera, hizo que un niño suba al bus para firmarle la camiseta de Alianza Lima y que le gritaba en todo momento que le firmara su camiseta. Así, lo tomó en sus brazos y se tomó foto con él.