El capitán de la selección peruana, Paolo Guerrero, quien pretende la anulación de su suspensión por dopaje, reducida a seis meses, declarará "a finales de abril" ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), informaron este martes fuentes de la instancia jurídica.
La FIFA había anunciado a finales de diciembre que la suspensión de un año infligida al delantero del Flamengo había sido reducida a seis meses, por lo que concluiría el 3 de mayo, lo que le permitirá disputar el Mundial de Rusia-2018.
Pero el jugador de 34 años, recurrió a finales de enero esta decisión, y pidió que la decisión de su suspensión "sea anulada y que ninguna sanción le sea impuesta", indicó a la AFP un portavoz del TAS.
La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) apeló asimismo el 19 de febrero y pidió "una suspensión de al menos un año", añadió el portavoz.
La audiencia ante el TAS, con sede en Lausana, "aún no fue fijada, pero es probable que tenga lugar sobre finales del mes de abril", añadió dicha fuente.
El capitán de Perú había dado "positivo" por el metabolito de la cocaína benzoilecgonina, una sustancia prohibida por estimulante e incluida en la lista de prohibiciones de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) tras un control efectuado después de un partido de las eliminatorias mundialistas contra Argentina, el pasado 5 de octubre en Buenos Aires.
El jugador del Flamengo brasileño, que en su día fuera una joven promesa del Bayern de Múnich, se había perdido por este motivo los dos partidos del repechaje ante Nueva Zelanda, en los que Perú se clasificó para la fase final del Mundial, algo que no conseguía desde la edición de España-1982.
Guerrero podrá volver a jugar el 4 de mayo y por lo tanto estará en condiciones de ser convocado por su selección para el Mundial de Rusia (14 junio-15 julio), donde Perú quedó encuadrado en el grupo C, con unos primeros partidos ante Dinamarca (16 junio), Francia (21 junio) y Australia (26 junio).