La liga colombiana de fútbol amenazó con programar partidos a puerta cerrada o suspender el campeonato de primera división si los clubes son obligados a contratar seguridad privada para reemplazar a los policías en los estadios, de acuerdo a una norma que se debate en el Congreso.
El nuevo código contempla que la policía no podrá ingresar a los escenarios, y la seguridad quedaría en manos de empresas particulares.
Alarmada ante la posibilidad que los costos de seguridad aumenten considerablemente, la Dimayor (la entidad que administra el torneo de máxima división) manifestó su oposición a la medida.
"Estamos contemplando jugar a puerta cerrada o suspender el torneo colombiano", dijo presidente de la Dimayor, Jorge Perdomo, en una entrevista el miércoles con Blu Radio.
Los incidentes de violencia, con heridos y en algunas ocasiones con algunos muertos, afectan el fútbol colombianos pese las severas medidas de seguridad y las duras penas que contempla la ley.
En un comunicado de prensa, la Dimayor consideró que es "inviable la actividad de los clubes profesionales al asumir funciones que son competencia exclusiva de la Policía Nacional".
"La Dimayor y sus clubes profesionales (20) manifiestan a la opinión pública su preocupación y enfático rechazo ante la obligatoriedad que se pretende establecer de contratación de empresas de seguridad privada que sustituyan a la Policía Nacional en su obligación de garantizar la seguridad de los ciudadanos en el espectáculo del fútbol profesional colombiano", indicó la entidad el miércoles en un comunicado de prensa.