El liderazgo en una cancha se imponía con esfuerzo y calidad, pero en el vestuario muchas veces se aplicaba la ley del miedo. José Carranza tenía un poco de ambas, el ‘Puma’ jugó toda su carrera en Universitario de Deportes y causaba respeto en sus rivales, sus compañeros también temblaban al enfrentarlo en cada partido de práctica, todos menos a uno: Sergio Ibarra.
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El 2001, el ya trajinado Sergio Ibarra llegó al club y desde un principio quiso ganarse el puesto luchando todas en los entrenamientos. Un día, en un partido de práctica el ‘Checho’ fue a una dividida con el ‘Puma’ y el delantero sintió la pegada del mediocampista que le dejó una ‘Caricia’. A la siguiente jugada, José Carranza volvió a entrarle fuerte, pero esta vez el argentino no se quedó tranquilo, reaccionó, se le quiso ir encima a líder y tuvieron que ser separados por sus compañeros.
Teddy Cardama, técnico de ese equipo merengue, vio el ambiente caldeado y decidió terminar el entrenamiento y mandar a todos a las duchas. Camino al camarín, luego de trotar al borde del campo, ‘Chemo’ Del Solar, de gran ascendencia sobre el ‘Puma’, medio en broma y medio en serio le calentó la cabeza al ídolo merengue y le dijo: “Puma como cambian los tiempos, ahora viene uno nuevo y te hace el pare delante de todos. Ya no eres lo que eras, las cosas se te fueron de las manos”. Carranza miró seriamente a su amigo y respondió: “vas a ver como arreglo el tema”.
Ya en el camarín, Carranza fue directo a donde estaba Ibarra y lo sorprendió con un manazo y le soltó: “Así que eres faltoso”. El ‘Checho’, que se acababa de bañar, resbaló y se cayó al suelo, pero su reacción no se hizo esperar. Se ató las zapatillas, cogió dos chimpunes como si fueran guantes de boxeo y se le fue encima al volante. Fue tal la cara de rabia que puso el goleador que sus compañeros tuvieron que sujetarlo para que la pelea no llegue a más. Entre seis tuvieron que sujetar al ‘Checho’ que parecía el increíble Hulk según cuentan testigos del incidente.
Tanto forcejeó el atacante y con tanta fuerza que terminó zafándose de sus compañeros, pero ya ‘Chemo’ se había llevado a José Carranza a una oficina del estadio Monumental. El delantero no se quedó tranquilo y empezó a buscar al ‘Puma’ por todos lados, pero no lo encontró. Del Solar, que sabía que si el nueve encontraba a su compadre lo iba a dejar ‘Globo’.
El ‘Checho’, que había practicado boxeo en su natal Córdoba, estaba como un ‘Doberman’ pegado al carro del ‘Puma’ en la playa de estacionamiento, esperando que llegue para cocinarlo a puñetes. ‘Chemo’ desde una ventana del Estadio Monumental vio al argentino decidido a no moverse y mandó a pedir unas pizzas y almorzó con el ídolo crema. Después de esperarlo tres horas, el hambre le ganó la batalla a Sergio Ibarra y se fue del club masticando su bronca.
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Al día siguiente todos esperaban el segundo round y las apuestas iban a favor del hoy exitoso hombre de televisión, sin embargo ‘Chemo’ sacó a relucir sus galones en el vestuario y años dentro del del fútbol. Llamó a los dos a la calma y los hizo amistarse. El ‘Puma’ pidió disculpas, pero eso sí, Sergio Ibarra lo miró a los ojos y le dejó en claro que no iba a aguantar una más y en la próxima ni entre diez jugadores lo iban a detener.
Sergio Ibarra jugó en el 2001 por Universitario y pese a su buena producción goleadora (14 anotaciones) el equipo quedó lejos de los primeros lugares consiguiendo un octavo lugar. Ese año el cuadro crema fue dirigido por Roberto Chale, Teddy Cardama y Javier Chirinos. Finalizada esta temporada, afectada por una grave crisis económica, el popular ‘Checho’ firmaría su regreso a Alianza Atlético de Sullana. Luego, en el 2004-2005 alcanzaría la gloria con Cienciano del Cusco.
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