No solo de fútbol vive Paolo Guerrero. El delantero y capitán de Club César Vallejo sorprendió a sus compañeros tras no ser parte de la delegación que volvió Trujillo, tras la derrota ante Sport Boys, y por la noche abordó un vuelo con rumbo a Brasil para solucionar más de un tema familiar.
El ‘Depredador’ fue abordado por la prensa deportiva en el aeropuerto Jorge Chávez donde reconoció que la lesión en su tobillo derecho no es de consideración. “Tengo mucho dolor; felizmente me hice una prueba y no era grave”, manifestó antes de abordar el vuelo que lo llevará a Brasil.
El entorno de Paolo Guerrero pudo corroborar que el jugador solicitó un permiso especial a Roberto Mosquera y Richard Acuña para atender una complicación medica con el menor de sus hijos, José Paolo, quien días a tras fue internado en una clínica de Río de Janeiro.
Asimismo, se pudo conocer que el goleador también viajó para volver con Ana Paula Consorte y sus menores hijos que ayer compartieron el cumpleaños número 11 de la hija mayor de la bailarina brasileña.
Tras de las gestiones que Paolo Guerrero ha solicitado a la directiva de Richard Acuña es la reserva de vacantes para sus hijos en uno de los colegios más exclusivos de la ciudad trujillana lo que habla de la intención del goleador de vivir junto a su familia en el Perú.
El depredador recibirá la noticia de su convocatoria a la selección peruana en Río de Janeiro, aprovechando que no será tomado en cuenta por Roberto Mosquera para el duelo del jueves ante Alianza Atlético de Sullana, y recién regresar a Lim el próximo lunes 18 y empezar el trabajo con la selección peruana.
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