Flamengo había presentado una demanda para reclamar la devolución de 1,8 millones de reales (aproximadamente 360.000 dólares al cambio actual) por los derechos de imagen que habían sido pagados a Paolo Guerrero durante el período en que defendió al club y estuvo suspendido por doping en 2017. El club argumentaba que el jugador debía reembolsar ese dinero correspondiente a los 120 días en los que no pudo utilizar su imagen debido a la sanción impuesta.
Sin embargo, la jueza Françoise Picot Cully, de la Sala Civil Número 9ª del Tribunal de Justicia de Río de Janeiro, desestimó la demanda del equipo brasileño y además condenó al club a indemnizar al futbolista con el 10% del valor reclamado, es decir, 180 mil reales.
En su sentencia, la jueza argumentó que la suspensión temporal del jugador no implicaba la suspensión de los efectos del contrato de cesión de imagen, ya que Guerrero seguía estando en condiciones de ceder el uso de su imagen, apodo deportivo y voz para ser explotados por el club. La decisión de la jueza deja claro que la sanción impuesta no afectaba los derechos de imagen adquiridos por Flamengo.
Además, la jueza recordó que el Mengão respaldó al “Depredador” durante su lucha por demostrar su inocencia en el caso de dopaje y lo trató como un “profesional ejemplar”. Basándose en ello, la decisión judicial fue en contra del club.
Esta victoria legal representa un logro importante para Paolo Guerrero y refuerza su posición en la disputa con Flamengo en relación a los derechos de imagen. El delantero peruano continúa destacando tanto en el ámbito deportivo como en el legal, demostrando su perseverancia y determinación en la defensa de sus intereses.
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