Neymar perdió el control durante el compromiso de PSG y Olympique Marsella, el clásico de Francia. En el tiempo de descuento, el árbitro detuvo el partido para resolver una situación violenta. Sin embargo, el brasileño cometió una falta grave que, en primera instancia, no fue vista por el juez principal.
De hecho, la autoridad de la contienda recurrió al VAR para revisar la discutida acción. El delantero de ‘Les Parisiens’ golpeó en la cabeza al defensor Álvaro Gonzalez. Entonces, el colegiado mostró la tarjeta roja a la estrella del cuadro capitalino, quien abandonó el campo acusando al español de proferir insultos racistas.
Después de la escena, Neymar puede enfrentar una dura sanción. De acuerdo con información RMC Sport, el atacante de ‘Les Bleus’ podría ser sancionado de cuatro a siete compromisos. El medio citado se basó en los reglamentos de la Comisión de Disciplina de la Liga de Fútbol Profesional.
El anexo 2 del artículo 13.1 del Reglamento Disciplinario de la Federación Francesa de Fútbol señala que un acto violento cometido fuera del desarrollo del juego sin provocar una lesión puede costar siete partidos de suspensión para el agresor. Como se recuerda, el árbitro detuvo el clásico cuando ‘Ney’ arremetió contra el adversario.
Los castigos varían de acuerdo con la gravedad de la falta. Un intento de agresión puede recibir seis duelos. Una pelea voluntaria puede ser sancionada con un máximo de cinco. Mientras que un comportamiento intimidante o amenazante, puede llegar a cuatro partidos.
La Comisión de Disciplina LPF se reúne todos los miércoles para tomar una decisión con respecto al caso de Neymar. No obstante, el proceso puede prologarse hasta una semana porque al tratarse de un clásico, los integrantes esperarán más elementos para analizar sobre el caso.
Por lo pronto, el delantero brasileño se perderá el partido de PSG ante el Metz de este jueves por la Ligue 1. Layvin Kurzawa y Leandro Paredes, los otros dos expulsado en el conjunto de la capital, también son bajas en el conjunto comandado por Thomas Tuchel.